Un 17% de las embarazadas sufre hipertensión gestacional

Mujer embarazada
CORDON PRESS
Actualizado: martes, 10 noviembre 2015 13:44

   MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -

   Hasta un 17 por ciento de las mujeres embarazadas sufre lo que se denomina hipertensión gestacional, una alteración leve pero que puede generar complicaciones en el embarazo, según ha afirmado la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA).

   La hipertensión gestacional se produce cuando la mujer tiene la presión arterial superior a 140/90mm Hg después de la semana 20 de embarazo, sin que se acompañe de daños en órganos sensibles, especialmente el riñón. Las mujeres con más riesgo de padecer esta subida de tensión son las que presentan sobrepeso u obesidad, las que tienen un embarazo múltiple, las mayores de 40 años, y las que ya han presentado problemas en gestaciones anteriores.

   "Algunas mujeres presentan cifras de presión arterial elevada antes de la semana 20. Se trata de casos en los que la mujer ya era hipertensa antes de la gestación sin saberlo, ya que se trata de una enfermedad asintomática", explica la doctora María Abad. "De hecho, el seguimiento que se realiza a las embarazadas en nuestro país es una oportunidad de detectar problemas de salud prevenibles, que van más allá de los nueve meses que dura la gestación".

   La doctora aconseja que, para evitar complicaciones derivadas de la hipertensión, las embarazadas se tomen la presión arterial a domicilio para facilitar la realización de un diagnóstico lo más preciso posible, además de realizarse los correspondientes controles analíticos.

   Entre las complicaciones que puede sufrir una mujer embarazada por este motivo son la preeclampsia y el sindrome de HELLP. La preeclampsia puede ser leve o grave, y se detecta cuando la mujer, además de tener la presión arterial elevada, presenta una pérdida de proteínas en la orina.

    La aparición de hipertensión gestacional puede motivar que se deba finalizar la gestación antes del témino del embarazo, entre las 38-40 semanas, "puesto que el riesgo de que se produzcan complicaciones graves que comprometan la salud de la madre es mayor que el beneficio de dejar llevar a término para el feto, aunque cada caso se va valorando según la evolución", informa Abad.

   Para evitar esta situación, la doctora Abad recomienda a las embarazadas mantener un estilo de vida saludable, incluso antes de comenzar la gestación. Mantener una vida activa, seguir una dieta mediterránea variada y un adecuado aporte de productos lácteos puede retrasar la aparición de la hipertensión o, por lo menos, facilitar su manejo. Tampoco deben faltar en la dieta de las embarazadas las proteínas para un adecuado crecimiento del feto, y el suplemento de ácido fólico para disminuir las complicaciones neurológicas graves que aparecen cuando se produce un déficit.