BILBAO, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
La XLII Semana Médica de Bilbao se ha centrado este año en las personas mayores, que tienen más autoanticuerpos que los adultos debido a la respuesta inmunológica al daño orgánico propia del envejecimiento, según los expertos.
La XLII Semana Médica de Bilbao está organizada por la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao, con la colaboración del Hospital Universitario Cruces, las clínicas IMQ y la Facultad de Medicina de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).
La doctora Saioa Eguiluz, especialista en Medicina Interna del Hospital Universitario Araba, ha protagonizado la última de las conferencias previstas en la XLII Semana Médica de Bilbao, celebrada en el auditorio de la Clínica IMQ Zorrotzaurre, y que ha tenido como título 'Enfermedades sistémicas en el paciente mayor'.
Tal y como ha puesto de manifiesto, "en las personas mayores se ha demostrado una mayor prevalencia de autoanticuerpos (fundamentalmente no organoespecíficos) que en las personas menores de 65 años". Según ha explicado, "unos autoanticuerpos denominados anticardiolipina (aCL), pueden aparecer en cantidades bajas o medias hasta en un 51 por ciento de la población mayor de 65 años, cuando en menores de 65 están presentes en menos del 2 por ciento".
"Esto no se traduce en una mayor prevalencia de enfermedades autoinmunes. Parece relacionado con la respuesta inmunológica al daño orgánico propio del envejecimiento", ha explicado la experta, quien ha aclarado, asimismo, que este mayor nivel de anticuerpos en el paciente mayor puede, en ocasiones, "estar en relación con el tratamiento farmacológico recibido".
INMUNOSENESCENCIA
La doctora Eguiluz ha incidido también en el fenómeno de la inmunosenescencia, "una disminución progresiva de la respuesta inmune que afecta a todos los componentes del sistema inmunológico que es un fenómeno natural del envejecimiento".
Esta característica de la senectud influye de manera relevante "en la morbilidad y mortalidad de los adultos mayores, ya que favorece una mayor probabilidad de aparición de enfermedades infecciosas y cáncer", ha precisado.
La internista del Hospital Universitario Araba ha manifestado que "las enfermedades autoinmunes sistémicas pueden aparecer en el paciente mayor con características diferentes a las habituales en pacientes más jóvenes y, además, aunque suelen ser de curso más larvado, algunas pueden ser graves".
La experta ha señalado que en el caso de que se dé un diagnóstico de miopatías inflamatorias o de síndrome antifosfolípido "es conveniente descartar la existencia o no de un posible cáncer".
A la hora de elegir el tratamiento más adecuado, ha indicado, "hay que individualizar, valorando las características de la enfermedad y del paciente y teniendo en cuenta comorbilidades, polifarmacia, riesgo de efectos adversos, etcétera".
Entre los tipos de enfermedades autoinmunes en el paciente mayor la experta ha citado a la polimialgia reumática y la arteritis de células gigantes. Por otro lado, en cuanto a las enfermedades autoinmunes presentes en pacientes más jóvenes pero que también pueden tener un inicio más tardío, ha señalado al lupus eritematoso sistémico (LES), el síndrome de Sjögren, la esclerosis sistémica, las miopatías inflamatorias, el síndrome antifosfolípido y la vasculitis ANCA (+).
