BERLÍN, 6 Jun. (DPA/EP) -
El veredicto contra el enfermero Niels Hgel, que confesó haber asesinado a 100 pacientes suministrándoles inyecciones letales, se emitirá este jueves en Alemania.
Hgel, de 42 años, ha sido acusado de suministrar medicamentos a cien pacientes, el más joven de ellos de 34 años y el mayor 96 años, primero en un hospital de Oldemburgo y después en uno de Delmenhorst, en Baja Sajonia, desde el año 2000 hasta 2005, para desencadenar fallos cardíacos o un colapso circulatorio.
Los fiscales han indicado que las motivaciones que lo llevaron a actuar así podrían ser la búsqueda de aprobación por parte de sus colegas una vez tratara de reanimarlos y salvar sus vidas. Muchos de los pacientes no sobrevivieron.
El acusado, que confesó todos los crímenes en el inicio del juicio en su contra en Oldemburgo, aseveró que se trataba de "una pose para infundir respeto" y que disfrutaba de elogios y reconocimiento cuando lograba devolver la vida a los pacientes.
En 2015, el enfermero fue declarado culpable y condenado a cadena perpetua por la Justicia alemana por doble asesinato, dos intentos de asesinato y dos casos de lesiones graves a pacientes ingresados en la unidad de cuidados intensivos en el hospital de la ciudad de Delmenhorst, próxima a Bremen.
Hgel fue descubierto en 2005 por una enfermera en Delmenhorst cuando quiso darle un medicamento no prescrito a un paciente. Sin embargo, las familias de las víctimas tuvieron que esperar mucho tiempo para poder asistir a un juicio. Fueron necesarios años para que saliera a la luz la magnitud de la supuesta serie de asesinatos.
Durante casi tres años se exhumaron cuerpos en busca de rastros de posibles compuestos inyectados por Hogel. El informe final indicó que se le puede atribuir la muerte de 62 personas en Delmenhorst y otros 38 casos en Oldemburgo, aunque el número podría ser superior, ya que algunos de sus pacientes fueron incinerados.