MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Atención Infantil Temprana San Juan de Dios de Sevilla ha alertado de que "empiezan a detectarse" cuadros de ansiedad, dependencia, irritabilidad, problemas de sueño o frustración en niños "muy pequeños" a causa de un uso no controlado de móviles.
Además, la picóloga del centro, Lucía Ponce, ha advertido de que en un modelo educacional en el que los padres hacen un uso masivo de las nuevas tecnologías con los pequeños se pierden oportunidades "para la interacción y para aprender relaciones sociales".
"Si a un niño se le ponen constantemente vídeos que, por su retiración han hecho que éste aprenda a contar en inglés antes de saber usar palabras en su idioma materno, el niño está asumiendo contenidos y aprendizajes descontextualizados", ha explicado Ponce.
Por otra parte, utilizar el móvil como moneda de cambio con los niños se traduce también en uso negativo. La experta ha indicado que si se ofrece a un niño un móvil para que acceda a contenidos de entretenimiento mientras se le da de comer, se desvía la atención de la comida al móvil, lo que provoca que pierda atención sensorial y no aprenda a comer.
"Eso hace que no le estemos enseñando una correcta relación con la comida y si el niño es buen comedor puede, incluso, no percibir correctamente su nivel de saciedad y haga ingestas muy superiores a las que debe porque está pendiente de unos dibujos, no de qué y cómo se come", ha explicado Ponce.
No obstante, desde el centro sevillano han abogado por un uso controlado y responsable de estos dispositivos por parte de los padres o cuidadores de los niños, ya que pueden favorecer habilidades como la resolución de conflictos, la coordinación visomotora o la capacidad de asociación y contextualización. "Podemos hacer uso de dispositivos móviles bajo la premisa del aprendizaje, sí; bajo la del entretenimiento, no", en palabras de la psicóloga.
El tiempo que los adultos y la familia pasan mirando las pantallas de sus dispositivos móviles frente al que dedican a los niños también es importante "pues estamos enseñándoles un patrón que ellos van a reproducir", ha explicado Ponce. En este contexto, hay que marcar espacios y momentos libres de móviles en casa y delimitar su uso en determinadas franjas horarias.
JUGUETES DE SIEMPRE PARA DESARROLLAR HABILIDADES
La psicóloga también ha especificado que es "positivo" buscar jugeutes que fomenten la interacción entre iguales y con adultos. Para ello, "los juegos simbólicos, es decir, las cocinas de juguete, jugar a ser doctor y paciente o veterinarios funciona muy bien".
Por otra parte, ha aludido a buscar juguetes que fomenten la creatividad del niño. "Materiales no estructurados que le permitan experimentar, comunicarse o pedir ayuda. Esto sucede, por ejemplo, con los juegos a base de piezas que les permiten monar edificios, aparatos o inventos", ha explicado la psicóloga, que ha incidido en que estos juegos favorecen "el aumento de conexiones a nivel neurológico".
Por último, Ponce ha aconsejado los clásicos juegos de mesa, que son "muy educativos y suponen un buen entretenimiento para la vida, pues la alternancia de turnos los educa en el respecto y modula la paciencia y el hecho de ganar o perder una partida les permite disfrutar de las victorias y aceptar las derrotas: aprenden a ser tolerantes con la frustración".