MADRID, 26 Ago. (EDIZIONES) -
Depende de la época del año se es más o menos propenso a un contagio de determinadas enfermedades. No obstante, siempre hay una serie de patologías que da igual la época del año en la que nos encontremos porque es muy fácil su contagio. Por el mero contacto, ya sea directo o indirecto, podemos infectarnos.
En concreto, las infecciones que se transmiten por contacto directo se propagan cuando un microorganismo causante de enfermedades pasa de la persona infectada a la persona no infectada por contacto físico directo. Éste consiste en tocar o besar, tener contacto sexual o contacto con secreciones o heridas de una persona infectada, según precisa el departamento de Salud de Estados Unidos.
Mientras, las infecciones que se transmiten por contacto indirecto se propagan cuando una persona infectada estornuda o tose, mandando las gotitas infectadas al aire, de forma que las personas saludables las inhalan, o bien las gotitas aterrizan en sus ojos, nariz o boca. Además, estas gotitas también pueden posarse en determinadas zonas y las personas saludables tocar los objetos contaminados con sus manos pasándolas luego por sus ojos, nariz o boca.
En este sentido, en una entrevista con Infosalus, José María Cots, coordinador del Grupo de Infecciosas de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) enumera el listado de las 10 enfermedades más atendidas en la atención primaria en España (por este orden):
1.- Faringitis o pacientes con dolor de garganta y fiebre, y puede haber también cefalea.
2.- Resfriado común, por el que las personas sienten malestar general, fiebre, y rinitis o afectación de la nariz.
3.- Bronquitis aguda, por la que se sufre una tos muy fuerte o febrícula, malestar general, además de expectoración.
4.- La cistitis conlleva molestias al orinar, como escozor, por ejemplo.
5.- La diarrea infecciosa provoca nauseas o vómitos y diarrea o retortijones.
6.- Conjuntivitis infecciosa. Los pacientes con conjuntivitis vírica suelen tener el ojo rojo con molestias, tipo ardor y escozor, lagrimeo profuso y sensibilidad a la luz. Es muy frecuente la presencia de secreción en forma de legañas, generalmente al despertarse. En ocasiones se produce hinchazón de párpados.
7.- Herida o úlcera infectadas a través de la contaminación de gérmenes de la piel. Provocan dolor, inflamación, rojez o secreción purulenta.
8.- La vaginitis candidiásica provoca mucho picor y ardor en la zona de labios y vagina, cambio en el flujo, dolor en relaciones sexuales, micción dolorosa.
9.- Las exacerbaciones infecciosas de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) se producen por un agravamiento de la patología con motivo de una infección. Causa dificultad para respirar, fatiga, disnea, sibilancia, o mucha tos. Se puede manifestar a través de una bronquitis crónica, que implica una tos prolongada con moco, o bien como enfisema, una dolencia que conlleva un daño a los pulmones con el tiempo, esputo purulento, por ejemplo.
10.- Sinusitis aguda puede conllevar mal aliento o pérdida del sentido del olfato, tos, malestar general, fiebre, dolor de cabeza, por detrás de los ojos, de los dientes, sensibilidad facial, congestión y secreción nasal, o dolor de garganta.
"Suelen contagiarse por un virus a través del aire, de persona a persona, por la tos, por un estornudo, o por dar la mano cuando has estornudado, por ejemplo. En cambio, en el caso de la cistitis en la mujer se contrae por un bicho que tiene en el ano. Es contagio ano-uretra. Se trata de una infección que todas las mujeres contraerán a lo largo de su vida y hasta en un 30% de los casos serán recurrentes", explica el especialista de la semFYC.
Sobre cómo prevenir estos contagios, Cots resalta que donde más se pueden coger los virus es en los autobuses urbanos, por ejemplo, aunque donde hay una mayor concentración de virus es en los centros hospitalarios, en urgencias, o en las consultas de atención primaria. "Si vas a por una receta y el de al lado te tose tienes posibilidad de contagio. Hay que taparse y usar pañuelos de papel desechables al toser, lavarse frecuentemente las manos tanto si estás enfermo como si lo está un familiar tuyo, además de los profesionales sanitarios, que deben constantemente lavarse las manos", subraya.
EL PELIGRO DE LOS ANTIBIÓTICOS
En este contexto, el especialista en medicina de familia llama la atención sobre el elevado consumo de antibióticos que se registra en España, un hecho que a su juicio lleva a hacer una reflexión a la comunidad médica para prescribirlos mejor. Según avisa, las tres enfermedades más frecuentes son víricas y los antibióticos no sirven para nada en esos casos.
"Por eso hay mucho trabajo que realizar. No sirve en la faringitis dar un antibiótico porque lo más frecuente es que sea un virus. Su administración puede conllevar más efectos secundarios y además, se puede alargar el proceso viral", sostiene.
Finalmente, recuerda los datos del Eurobarómetro de 2016 que señalan que España es uno de los países que en el último año más antibióticos se han consumido y, en concreto, en estas tres patologías más contagiosas, "para las que no sirve porque son víricas", insiste, recordando que los antibióticos siempre debe prescribirlos un médico y no ser proporcionados en la farmacia sin receta.