Un uso estable de inmunoglobinas en el SNS permitiría a España ahorrar más de 74 millones de euros, según un estudio

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Publicado: martes, 7 octubre 2025 19:07

MADRID 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El acceso adecuado y estable de inmunoglobulinas en el Sistema Nacional de Salud español (SNS) permitiría a España ahorrar más de 74 millones de euros al año, así como mejorar los resultados clínicos de "decenas de miles" de pacientes con inmunodeficiencias primarias y secundarias, leucemias, mielomas y enfermedades neurológicas, según un estudio presentado este martes por EY y Grifols.

El informe 'Asegurar el tratamiento con inmunoglobulinas en España: necesidad de una regulación alternativa' muestra que, en el caso de las inmunodeficiencias primarias, el uso de las inmunoglobinas supondría un recorte de 33,3 millones de euros anuales en gasto sanitario; mientras que en el caso de leucemia linfocítica crónica el ahorra ascendería a 29,8 millones de euros; y en mieloma múltiple, a 11,3 millones de euros.

Aunque estas cifras "reflejan la coste-eficiencia" de su uso, los autores del texto también han querido poner el foco en la mejora de la calidad de vida de los más de 22.000 pacientes españoles dependientes de estos tratamientos, que sufren menos hospitalizaciones, menos visitas médicas y menos cuidados intensivos, con el consiguiente "alivio directo" a la sostenibilidad del sistema sanitario.

"Invertir en inmunoglobulinas no es solo una cuestión económica, sino una apuesta estratégica por la salud y el bienestar de los pacientes", ha afirmado el asesor sénior del sector Salud y Life Sciences de EY Jaime del Barrio.

En el informe también se señala que la falta de acceso o de suministro estable de inmunoglobulinas "agrava considerablemente" las complicaciones médicas, y es que aquellos pacientes con inmunodeficiencias pueden ver aumentada la incidencia de infecciones respiratorias, meningitis o artritis séptica, así como la necesidad de ingresos hospitalarios.

Los pacientes de oncohematología y neurología, por su parte, se benefician del tratamiento con inmunoglobulinas con una menor gravedad de las infecciones, con una duración más corta y previene sufrir daños permanentes.

ESPAÑA SOLO CUBRE UN 36% DE SUS NECESIDADES DE PLASMA

A pesar de ello, España tan solo cubre un 36 por ciento de sus necesidades de plasma, frente al 63 por ciento de la Unión Europea. La donación directa mediante plasmaféresis apenas alcanza el 13 por ciento en España, muy por debajo del 40 por ciento europeo.

Esta situación de déficit hace que se ponga en riesgo la seguridad del suministro y provoca que el sistema sanitario sea más vulnerable ante crisis comerciales o políticas, y es que la mayoría del plasma se importa desde Estados Unidos.

"La limitada disponibilidad de plasma, junto con la fuerte dependencia de terceros países, pone en riesgo el acceso de los pacientes a sus tratamientos. Por eso, es imprescindible avanzar hacia un modelo regulatorio que garantice la sostenibilidad del sistema y asegure la continuidad asistencial para quienes más lo necesitan", ha añadido Del Barrio.

Cabe destacar que las inmunoglobinas están consideradas como medicamentos esenciales por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), además de estar incluidas en la lista de medicamentos críticos de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), y es que no existe un tratamiento alternativo.

Es por ello por lo que los autores del informe han subrayado la importancia de reforzar la capacidad estratégica española en este ámbito, así como de avanzar hacia una mayor autosuficiencia en productos hospitalarios críticos como las inmunoglobinas.

"Dada su calificación como hemoderivados esenciales, fortalecer la producción nacional no solo reduciría riesgos, sino que contribuiría a garantizar la estabilidad y resiliencia del sistema en contextos de incertidumbre comercial y geopolítica", han agregado.

FOMENTAR LA DONACIÓN DE PLASMA

Para revertir esta situación, en el informe se subraya la necesidad de fomentar la donación de plasma, de reducir la dependencia de las importaciones, de reforzar la autonomía estratégica europea y de adaptar la legislación vigente para reconocer el valor esencial y crítico de estos medicamentos.

En este sentido, ha reconocido que la Unión Europea fijó en su Plan Resilient EU2030 que es necesario crear planes de contingencia para garantizar el suministro y la producción de medicamentos hemoderivados, y así llevar a cabo la Autonomía Estratégica Abierta de la UE.

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