A urgencias con el niño por una picadura de insecto

Niña llorando
PIXABAY
Actualizado: miércoles, 13 julio 2016 10:32

   MADRID, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Durante los meses de verano las urgencias pediátricas registran un incremento de consultas de lesiones en la piel provocadas por picaduras de insectos que, pese a no ser un problema de salud grave, sí resulta muy molesto para los niños y alarmante para los padres.

   Así lo ha reconocido la coordinadora del Servicio de Urgencias Pediátricas del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla, Pilar Camacho, que reconoce que este incremente se debe a una mayor presencia de mosquitos, abejas y avispas, sumado a que los niños pasan más tiempo al aire libre y a que la ropa que utilizan es más ligera por las altas temperaturas.

   La primera pregunta que realizan muchos padres en estos casos es saber a qué insecto pertenece la picadura, algo que en ocasiones es posible dilucidar por las características de la picadura o su localización.

"Los insectos que actúan con más frecuencia en los niños son los mosquitos y los más peligrosos, las avispas y abejas", asegura la experta, que reconoce que el tipo de reacción de un niño ante una picadura también depende de la sensibilidad que tenga al veneno del insecto.

"La mayoría de las picaduras solo dan lugar a reacciones locales leves pese a que las lesiones de la cara, y principalmente las de los párpados, son muy llamativas por la deformidad que provocan", aclara la doctora.

   Sin embargo, "suelen ir acompañadas de picor, dolor, envejecimiento de la piel, hinchazón y, en algunas ocasiones, de reacciones alérgicas; estas sí son de mayor importancia".

CONSEJOS ANTES DE IR A URGENCIAS

   Cuando se produzca alguna picadura, esta experta recomienda mantener la calma, lavar la zona con agua fría, usar algún antiinflamatorio (paracetamol, ibuprofeno, etc.) para rebajar el dolor y la inflamación, y antihistamínicos para reducir el picor.

   Sobre estos fármacos, Camacho reconoce que los antihistamínicos orales son muy útiles ya que, al disminuir el picor, reducen el rascado y el riesgo de infecciones. En cambio, desaconseja las presentaciones en crema para los niños.

   No obstante, más allá de estos cuidados básicos "los padres deberán consultar con el pediatra, que valorará la lesión, sus posibles complicaciones y les ayudará a entender la diferencia entre una reacción típica habitual y una verdadera reacción alérgica".