Sólo 2 de cada 10 pacientes de oncología recibe una pauta nutricional de su médico para afrontar el tratamiento
MADRID, 18 May. (EUROPA PRESS) -
La sensación de debilidad muscular, la fatiga y el malestar general son los síntomas que más afectan a la calidad de vida de los pacientes oncológicos, según un estudio realizado por el Instituto Mas Palop sobre un universo de 200 pacientes de cáncer de mama, pulmón y colón en España, que releva que hasta un 30 por ciento sufre trastornos emocionales que derivan en episodios de ansiedad y depresión.
Además, aunque 7 de cada 10 pacientes reconoce que siente o ha sentido dolor durante el proceso de la enfermedad oncológica, sólo el 30 por ciento lo considera un efecto determinante en la pérdida de la sensación de bienestar, que suele achacarse mayoritariamente al malestar general producido por los efectos secundario de los tratamiento pautados de quimioterapia y radioterapia
La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) señala que el 50 por ciento de los casos diagnosticados ya sufre dolor en el momento del diagnóstico, porcentaje que crece hasta el 60% cuando el paciente comienza el tratamiento y hasta el 75% en aquellas personas en las que la enfermedad está en fase avanzada.
Por ello, los especialistas de la Clínica Mas Palop de Valencia abogan por la implantación de la fitoterapia y de pautas nutricionales adecuadas para cada paciente oncológico, junto con un programa de ejercicios moderados o la práctica de disciplinas como el Yoga, ya que pueden reducir la incidencia del dolor y el malestar general que padecen esta tipología de enfermos crónicos, según ha explicado el biólogo y asesor científico del Instituto Mas Palop, Juan Serrano Gandía.
Estos datos se desprenden del estudio 'Cómo se afronta el cáncer en España' del Instituto Mas Palop, que evalúa la implantación de la oncología integrativa entre los profesionales analizando los efectos de los tratamientos, el uso de terapias no convencionales y/o las recomendaciones nutricionales, sobre ejercicio y/o prácticas de relación para que el paciente afronte los efectos secundarios de éstos.
En este sentido, aunque cada vez hay mayor concienciación entre los profesionales, las estadísticas demuestran que todavía la oncología integrativa no se aplica de forma efectiva en España, como demuestra que sólo un 20% de los pacientes encuestados haya recibido pautas nutricionales adecuadas a cada circunstancia, o que raramente en un 5% de los casos se establecen protocolos de drenaje y detoxificación que eliminen los tóxicos, incluso los procedentes de tratamientos tan agresivos como la quimioterapia.
Para Serrano Gandía es necesario un cambio de modelo y que la medicina convencional se combine con terapias menos habituales que la complementen. Además, este experto ha defendido que, además de la nutrición y el ejercicio, se tengan en cuenta tratamientos homeopáticos y psicológicos, que "en conjunto permiten a las personas retornar a un estado de salud o, en su defecto, a sobrellevar con buena calidad de vida los efectos no deseados de los tratamientos convencionales".
SÓLO 2 DE CADA 10 RECIBE UNA PAUTA NUTRICIONAL DE SU MÉDICO
Solo el 20 por ciento de los pacientes oncológicos recibe de su médico especialista una recomendación o alguna pauta nutricional junto al tratamiento convencional pautado -quimio y radioterapia-, según el estudio.
Asimismo, muestra que los 40 pacientes que recibieron alguna indicación o pauta de los oncólogos y hematólogos que los trataban se limitó a incrementar el consumo de verduras y frutas para facilitar las digestiones, o a fomentar la dieta mediterránea, sin que se les redirigiese a un nutricionista, o se les ofreciese alguna dieta específica que pudiese ayudar a paliar los efectos secundarios de tratamientos pautados de quimioterapia y radioterapia, según el citado estudio.
De hecho, y según los pacientes consultados por el Instituto Mas Palop, el 40 por ciento tenían libertad en la elección de la alimentación por indicación del médico, y sólo un 10% decidió acudir por criterio propio a un nutricionista profesional. Además, otro 10% decidió seguir los consejos obtenidos en consultas de foros de Internet y redes sociales, sin que se contrastasen con profesionales de la nutrición.
Esta situación provoca molestias innecesarias a muchos de estos pacientes que podrían ver reducidos los efectos colaterales de los tratamientos de la medicina tradicional en procesos oncológicos agudos mediante terapias integrativas, esto es, protocolos orientados a complementar estos tratamientos convencionales para mejorar la calidad de vida de los pacientes, según Serrano Gandía.
Este experto recomienda comer correctamente para conservar el organismo en buena forma y la mente en plenitud de facultades, especialmente en situaciones en las que el organismo sufre tratamientos tan agresivos como la quimio y la radioterapia. En este sentido, y más allá de huir de los excesos y de los alimentos excesivamente manipulados o procesados, es necesario recurrir a especialistas en nutrición que nos ayuden a adoptar un nuevo modelo de alimentación, de forma individual, estudiando las circunstancias y situación del paciente.