MADRID, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Oftalmología Barraquer ha desarrollado una membrana de fibrina que concentra los factores de crecimiento de cada paciente y permite acortar el postoperatorio de la cirugía plástica ocular.
Desde el centro han informado que, gracias a esta técnica, después de una cirugía plástica ocular, en pacientes que presentan un hematoma, este desaparece al cabo de diez días, cuando en pacientes habituales hay que esperar más tiempo, y también se reducen de forma notoria el edema y la hinchazón.
"La membrana de fibrina consigue reducir el postoperatorio como nunca antes se había visto en las cirugías de oculoplastia. En general, si el tiempo de cicatrización suelen ser tres meses, la membrana permite acortarlo prácticamente a la mitad", ha destacado la oftalmóloga Marta López Fortuny, cirujana de oculoplastia en Barraquer, donde se aplica este procedimiento desde hace más de un año.
Esta membrana, han asegurado, ofrece múltiples beneficios, además de acortar el tiempo de postoperatorio. En primer lugar, han explicado, se trata de un procedimiento autólogo y biocompatible, esto es, se elabora a partir de una extracción muy pequeña de sangre, por lo que cada paciente es donante y receptor a la vez.
Esto significa que el tratamiento no genera rechazo y es apto para cualquier persona de cualquier edad, incluso si se encuentra en tratamiento médico. Además de no alargar el tiempo de la cirugía, el procedimiento apenas tiene contraindicaciones y es indoloro.
El tratamiento es apto para pacientes que se someten a intervenciones oculoplásticas, como aquellas realizadas en los párpados, en el lagrimal o en la órbita del ojo como respuesta a distintas patologías que requieren una reconstrucción palpebral o de la órbita, o bien a motivos puramente estéticos, como la blefaroplastia, cirugía que corrige los párpados caídos y las bolsas.
La membrana de fibrina se elabora a partir de una cantidad muy pequeña de sangre del paciente. Se aplica durante la cirugía, en la zona de la sutura, y durante los días siguientes a la operación desprende los factores de crecimiento aportando un valor extra a la cicatrización y a la regeneración del tejido. Cuando la membrana ha transferido todos los componentes, aproximadamente al cuarto día, se reabsorbe por completo sin ocasionar ninguna molestia al paciente.