MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Hace 50 años, en 1965, se realizaba el primer trasplante renal en España, lo que supuso un "hito para la historia del trasplante", afirma el director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, quien recuerda que "fue el comienzo de una apasionante aventura que ha redundado en la mejora de vida de salud de miles de pacientes españoles".
"Toda la historia del trasplante de órganos esta resumida en este medio siglo", señala en una entrevista a Europa Press; y quien hubiera dicho que España, que realizó este trasplante con retraso respecto a otros países como Francia o Estados Unidos - que lo habían culminado con éxito una década antes-, sería ahora líder a nivel mundial en materia de donación y trasplante de órganos.
En estos años se han realizado más de 62.000 trasplantes renales, el pasado año se realizaron 2.678 trasplantes renales, de ellos 423 fueron de donante vivo, 251 de donante en asistolia y 58 fueron infantiles (6 menores de 3 años). "Estamos en una cifra muy cercana a los 3.000 trasplantes al año, vamos a acabar con más de 2.800 trasplantes probablemente el 2015", afirma con el orgullo que da saber que España tiene la lista de espera por trasplante renal más baja del mundo -aproximadamente están en espera unos 4.500 pacientes al año-.
Madrid y Barcelona realizaron los primeros intentos fallidos de trasplante renal, que culminarían con éxito en 1965. En ese año, Josep María Gil-Vernet y Antoni Caralps realizaban en el Hospital Clinic de Barcelona el primer trasplante renal que finalizaba con éxito, lograron implantar en una mujer de 35 años un riñón procedente de una persona fallecida en un accidente de tráfico.
El injerto funcionó y la paciente evolucionó favorablemente con una larga vida postrasplante, que finalizó con el rechazo del órgano; lo normal teniendo en cuenta que en aquella época los riñones debían tener un parecido genético casi exacto ante la poco arsenal farmacológico existente contra el rechazo.
Pocos meses más tarde del de Barcelona, Carlos Alférez y Luis Hernando repetían la hazaña en Madrid, explica el director de la ONT quien ve más que apropiado el homenaje que se realiza este jueves a los primeros trasplantes renales. "Es un homenaje merecido a los pioneros de estos trasplantes que tuvieron que afrontar muchas incomprensiones de todo tipo. Hay que tener en cuenta que entonces no se disponían de los adelantos que tenemos hoy", afirma.
Para hacerse una idea del avance que se ha producido, advierte, solo hay que pensar que "España es el único país de un tamaño medio grande que tiene más enfermos con un riñón trasplantado por la calle que enfermos en diálisis". Concretamente, de un total de 55.143 pacientes en tratamiento de sustitución renal (trasplante o diálisis), el 51,9 por ciento han sido trasplantados con un injerto que funciona, frente al 42,6 por ciento que reciben hemodiálisis y el 5,5 por ciento que están en diálisis peritoneal.
Para celebrar el aniversario, el Hospital Clinic de Barcelona ha ofrecido un emotivo homenaje científico a los pioneros de esta terapia, que ha contado con el Conseller de Salut de la Generalitat de Cataluña, Boi Ruiz, el director general del Hospital Clinic, Josep María Piqué, el director médico, Josep Maria Campistol, la directora de enfermería, Adelaida Zabalegui y el propio Matesanz.
PRESENTE Y FUTURO DEL TRASPLANTE RENAL
Lo que comenzó siendo una intervención 'excepcional' se ha convertido con los años en una terapéutica habitual que paulatinamente se ha ido extendiendo por todo el país, ampliando su campo de actuación hasta el punto que cada vez se practica en pacientes de mayor y menor edad. Actualmente, 46 hospitales españoles tienen programas de trasplante renal -39 de adultos y 7 infantiles-.
"Se ha mejorado en muchos aspectos, la cirugía es mucho menos agresiva, se hace el trasplante de vivo mediante laparoscopia, cuando antes era una cirugía bastante agresiva; la medicación ha mejorado de forma radical, y hoy en día la esperanza de vida de los pacientes trasplantados y el injerto ha mejorado de forma muy clara; antes eran paciente muy escogidos y hoy están trasplantados enfermos de más de 80 años", afirma.
Como curiosidad, el récord de supervivencia del trasplante renal en España supera los 46 años; se trata de un paciente que recibió un trasplante de vivo donado por su hermano gemelo en 1969 en el Hospital Clinic de Barcelona. Y hasta ahora el receptor más joven tenía 22 meses, y el de más edad, 84 años.
Respecto a la supervivencia, antes de dar un dato, Matesanz defiende que hay que tener en cuenta que depende de muchos factores como la enfermedad, el órgano o la edad del paciente; aunque "se puede decir que la supervivencia del órgano trasplantado a los 10 años está muy cercana al 80 por ciento, y del paciente es superior todavía en pacientes jóvenes, llega al 90 por ciento".
El trasplante renal ha experimentado importantes cambios en los últimos años, especialmente en lo que se refiere a las formas de donación, donde se han introducido modalidades como el trasplante renal cruzado, las cadenas de trasplantes y el donante samaritano en la donación de vivo, o la donación en asistolia en el caso de la donación de personas fallecidas.
De cara al futuro, explica Matesanz, la ONT puesta "muy fuerte" por la donación de vivo, la donación en parada cardiaca y los programas especiales para pacientes que han tenido ya un trasplante o dos, "a los que es difícil encontrarles un donante, les estamos poniendo en marcha programas para estos enfermos que necesitan una esperanza".
EL AHORRO DEL TRASPLANTE
Desde la ONT recuerdan que, más allá de sus beneficios para el paciente, el trasplante renal es la terapia con mejor relación coste y efectividad para el tratamiento de la insuficiencia renal crónica. Su coste -en torno a los 50.000 euros, si se tiene en cuenta la intervención, la hospitalización y los fármacos del primer año- se amortiza al segundo año: un año después del trasplante el coste se reduce a los fármacos inmunosupresores que recibe el paciente.
En cambio, el coste de la diálisis - alrededor de 50.000 euros- aumenta cada año. El ahorro en diálisis que supone el trasplante renal permite financiar con creces el coste total del resto de trasplantes de órganos en España.