MADRID, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
Jordi Díaz Manera, investigador de la U762 CIBERER que lidera Eduard Gallardo en el Hospital Sant Pau, ha participado en dos ensayos clínicos realizados en pacientes con enfermedad de Pompe del adulto cuyos resultados se acaban de publicar en la revista 'The Lancet Neurology'.
La enfermedad de Pompe es una enfermedad minoritaria de origen genético producida por mutaciones en el gen GAA que codifica la alfaglucosidasa ácida, un enzima lisosomal que se encarga de metabolizar el glucógeno en el interior de los lisosomas de las células.
Los pacientes pueden desarrollar síntomas tanto en la edad infantil como en la adulta. En el caso de los pacientes adultos, estos desarrollan una debilidad muscular que progresa de forma lenta llevando a una discapacidad que es variable y que se asocia frecuentemente a una disfunción ventilatoria, obligándoles a usar una ventilación no invasiva en un número considerable de casos.
Existe una terapia enzimática desarrollada por Sanofi-Genzyme conocida como 'Myozime' o alfaglucosidasa. Estudios recientes han mostrado que los pacientes mejoran con la medicación, especialmente en los primeros años, pero que posteriormente inician una lenta progresión de los síntomas a pesar del tratamiento. Por este motivo varias farmacéuticas están desarrollando nuevas terapias, incluyendo nuevos enzimas y también terapia génica.
Diversos hospitales españoles han participados en los ensayos 'COMET' y 'PROPEL', que se acaban de publicar en The Lancet Neurology y están promovidos por las farmacéuticas Sanofi-Genzyme y Amicus.
El primero de ellos, el estudio 'COMET', es un ensayo en fase III randomizado doble ciego en el que se compara una nueva formulación enzimática, avalglucosidasa, con el fármaco aprobado alfaglucosidasa. Se han incluido 100 pacientes con enfermedad de Pompe del adulto que nunca habían recibido tratamiento y han sido tratados por 49 semanas.
Los resultados muestran que alfaglucosidasa no es inferior a avalglucosidasa en los cambios en la función respiratoria medida con la capacidad vital forzada (CVF), pero no se demuestra la superioridad de un fármaco respecto al otro. Por este motivo, todos los datos obtenidos en el resto de las pruebas son a nivel nominal. Existe una mejoría de la función motora, con una mayor distancia cubierta en la prueba de caminar de los seis minutos. El nuevo fármaco fue seguro y no se evidenciaron efectos secundarios considerables.
El otro estudio, 'PROPEL', es también un ensayo en fase III randomizado doble ciego que compara la eficacia y seguridad de la combinación de una nueva terapia enzimática, cipaglucosidasa, que se administra asociada a una chaperona oral contra el fármaco actualmente en el mercado, 'Myozime'.
Se reclutaron en este estudio un total de 122 pacientes con enfermedad de Pompe del adulto incluyendo pacientes que nunca habían recibido tratamiento alguno (27) y pacientes experimentados (95) que fueron tratados por 52 semanas.
Los resultados generales no muestran diferencias en el objetivo primario del estudio, la distancia recorrida en el test de los 6 minutos, entre los pacientes tratados con cipaglucosidasa y los tratados con alfaglucosidasa, por lo que todos los resultados obtenidos en otras pruebas funcionales son a nivel nominal.
El estudio sí muestra diferencias en la función ventilatoria medida mediante CVF entre las dos ramas del estudio a favor de cipaglucosidasa. En el análisis por subgrupos no se evidenciaron diferencias en los pacientes que nunca habían recibido tratamiento, pero sí en los que eran experimentados, tanto en la distancia recorrida en los 6 minutos como en el CVF. El fármaco era también seguro sin que se describiesen efectos adversos considerables.