MADRID, 18 May. (EUROPA PRESS) -
Cada vez hay más evidencias científicas que demuestran que tener mascota es beneficioso para la salud en el ámbito físico, psíquico y social porque "la terapia asistida con ayuda de animales demuestra que disminuye la depresión involutiva, ayuda a las personas con enfermedad y canaliza en las emociones, por lo que las personas son más felices e influye en la calidad de vida", ha asegurado el Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Jesús Sánchez Martos, durante la jornada 'Las mascotas como promotoras de salud'.
"Un animal aporta un aspecto positivo a las personas y lo que los veterinarios pretendemos es que, si los animales son bien tratados y educados, no tiene porque haber ningún problema", ha declarado el presidente del Colegio de Veterinarios de Madrid, Felipe Vilas.
En este sentido, para que un animal sea positivo "lo que se requiere es que tenga la mejor condición de bienestar animal; tener una atención sanitaria, un entorno acorde con sus características, una buena alimentación y asegurarnos que se desarrollan los vínculos afectivos que hacen que el animal sea feliz", añade el presidente.
Este es, entre otros, uno de los objetivos de la jornada. Reflejar la necesidad y el beneficio de tener un animal de compañía porque está demostrado que mejora la calidad de vida en general, y más detalladamente la de las personas más desfavorecidas.
El Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha hecho hincapié en la importancia de las mascotas para mejorar la salud recordando que "antes de la evidencia científica, me basaba en lo que veía y nunca olvidaré la mirada de mi perro, porque las emociones de los animales se reciben".
"Tener una mascota favorece a no padecer enfermedades cardiovasculares, porque pasear tres veces al día a un animal hace que hagas ejercicio", subraya Sánchez Martos. Además, "con las mascotas desaparece la soledad porque gracias a tu mascota se fomentan y funcionan las relaciones sociales".
BENEFICIOS DEL VÍNCULO AFECTIVO CON UN ANIMAL
Tal y como han señalado durante la jornada, los animales son capaces de canalizar las emociones, a veces "incluso más que nosotros mismos", advierte Sánchez Martos. "Soy consciente de que el perro sabe cuando estás mal y nos ayuda y, además, ellos tienen más memoria histórica que nosotros para recordar".
Las prácticas y evidencias han demostrado que la teoría del vínculo entre el animal y el ser humano se cumple, "sobre todo para los niños pequeños y para favorecer el vínculo terapéutico", ha indicado la coordinadora de la Cátedra de investigación Animales y Sociedad de la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid), Nuria Máximo Bocanegra.
Entre los beneficios para la salud más evidentes "el convivir con un animal favorece a la disminución de la presión arterial y del colesterol", señala Nuria Máximo. Asimismo, "los enfermos cardíacos tienen mayor probabilidad de sobrevivir porque aumenta hasta 8,6 veces más que para quienes no tienen perro".
Desde un punto de vista médico, el director médico del Hospital Universitario Sanchinarro, Carlos Mascías, ha asegurado que "la salud no solo es la ausencia de enfermedad porque las mascotas son promotoras de la salud".
Tener y querer a un animal de compañía "favorece a un mejor desarrollo del sistema inmunológico, a una menor incidencia de sufrir alergias, reduce el estrés y el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular", ha añadido el doctor.
TERAPIA ASISTIDA PARA ENFERMEDADES CRÓNICAS
Respecto a las enfermedades crónicas, tener mascota beneficia a pacientes que padecen cáncer, autismo, demencia, Alzheimer, sida, algún tipo de discapacidad, o enfermedades mentales como la esquizofrenia, la depresión y el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), entre muchas otras.
En el caso de personas con cáncer "esta demostrado que funciona, sobre todo en niños; hay muchos estudios que demuestran como rebajan la ansiedad y la sintomatología el tener una mascota", ha subrayado Nuria Máximo. "La terapia asistida hace que funcione ese vínculo y, para eso, se tiene que entrenar a los animales y debe haber un gran equipo detrás, entre ellos, un médico", añade.
En ocasiones, la terapia con animales no funciona y, por esta razón, es necesario estudiar las características del animal y de las personas como su situación social, económica y cultural.
A la hora de tratar con un animal, "en la cúspide de la pirámide debe estar el bienestar animal, seguido de la evidencia científica y la profesionalidad regulada del sector en cuanto a formación se refiere", ha concluido Nuria Máximo.
IMPORTANCIA DE LA INTERVENCIÓN
El objetivo de los profesionales que trabajan para conseguir la intervención animal en la salud de las personas es "poner al alcance de las personas menos favorecidas los beneficios de los animales, así como invertir en proyectos de investigación", ha destacado la directora de la Asociación Yaracán, Begoña Morenza.
"Las intervenciones trasladan de forma profesional los beneficios de las mascotas a entornos terapéuticos y educativos; actualmente, trabajamos con dos colegios públicos y los resultados son tremendos".
Respecto al proceso de intervención asistida en personas con algún trastorno o enfermedad, la asociación trabaja a nivel cognitivo, psicomotriz, comunicativo, social y emocional.
"El perro es el factor sorpresa porque no juzga, ni critica y su acercamiento no es invasivo", ha asegurado Begoña Morenza, quién ha añadido que el animal "es un potente estímulo que genera mucha motivación porque muchos de los problemas de los pacientes son la falta de ganas".
En lo que se refiere al desarrollo, "si al perro no le guiamos adecuadamente, no es una sesión de terapia; la forma correcta es sincronizar las necesidades de las personas que acuden con los objetivos del programa para que sea eficaz", insiste.
BUENOS RESULTADOS
En cuanto a los resultados, la asociación trató a Gabriela, una niña con cáncer, durante dos años y medio y "la sorpresa que recibimos fue cuando nos llamaron del hospital diciendo que Gabriela tomaba la medicación, que estaba más animada y quería salir a la calle y, sobre todo, que no hablaba del cáncer", ha expresado la directora de la asociación.
Otro caso expuesto ha sido el de Marina, una niña con parálisis cerebral que fue capaz, gracias a la terapia con perros, de articular verbalmente el nombre del perro.
TAMBIÉN AFECTA PSICOLÓGICAMENTE
La psicología busca "ayudar a las personas a encontrar sus propios recursos para alcanzar su nivel óptimo de bienestar", ha indicado la experta en psicomotricidad terapéutica y presidenta del Centro Integral de Terapias y Animales, Katya Vázquez Quer.
"Todo el mundo quiere la felicidad pero nos cuesta mucho conseguirla; hay que encontrar ese equilibrio entre lo que sentimos y lo que nos viene de fuera", y esto se puede conseguir gracias a los animales porque "se puede llegar a todos los parámetros de salud de la persona".
Desde el punto de vista psicológico y emocional, "los animales nos hacen ver que las cosas son más sencillas y que nada es tan complejo, por lo que reduce la desesperación", apunta la psicóloga.
La experta ha insistido en que los perros "comparten la tristeza y ofrecen una ayuda mutua por lo que el equilibrio emocional con los animales es bueno para la salud psicológica porque nos hacen ver lo que realmente importa".
En este sentido, ha presentado el programa 'Menudo Panorama' que sirve como motivación para trabajar en sesiones que parecen un "rollo" y, lo más destacado del método es que combina psicomotricidad, animales, naturaleza, agua, música y arte.
También "tenemos talleres como inteligencia emocional, prevención de fobias y formación en valores con perros; trabajamos muchos problemas de conducta como el trastorno negativista desafiante, el TDAH o la dificultad de aprendizaje", ha concluido.