Más del 80% de especialistas reconocen la importancia de estas pruebas diagnósticas
MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
Solo el 16,1 por ciento de los pacientes acceden a pruebas de biomarcadores para detectar Alzheimer en España, a pesar de que más del 80 por ciento de los especialistas las consideran fundamentales para diagnosticar esta enfermedad neurodegenerativa, según la encuesta multinacional 'Adelphi Real World Dementia'.
El estudio, que ha sido presentado durante la Alzheimer Europe Conference 2025, muestra que esta brecha también existe a nivel internacional, pues atendiendo a la media de los países analizados, únicamente el 15,2 por ciento de los pacientes accedió a las pruebas de biomarcadores para confirmar la patología específica.
El trabajo se basa en las respuestas de 779 médicos que tratan a un total de 5.551 pacientes con deterioro cognitivo leve y enfermedad de Alzheimer en Francia, Alemania, Italia, España, Reino Unido, Japón y Estados Unidos.
La enfermedad de Alzheimer afecta a aproximadamente 6,9 millones de personas en Europa, unas 800.000 en España, y se prevé que esta cifra casi llegue a duplicarse para 2050 debido al envejecimiento de la población.
Sin embargo, durante el encuentro en el que se han dado a conocer los resultados del estudios, los expertos en Alzheimer y demencias han advertido que estas patologías siguen estando infradiagnosticadas, lo que impide a los pacientes acceder a opciones de tratamiento y cuidados.
"Nos encontramos en un momento crítico en el que las decisiones que tomemos ahora marcarán el futuro de la atención a la enfermedad de Alzheimer en Europa", ha aseverado el jefe del Departamento de Psiquiatría Geriátrica del Central Institute of Mental Health y catedrático de la Facultad de Medicina de Mannheim en la Universidad de Heidelberg (Alemania), Lutz Frölich.
El especialista ha destacado que la ciencia ha proporcionado soluciones para abordar el Alzheimer de forma más eficaz en sus fases iniciales y poder reducir su carga, pero ha puntualizado que esto "solo será posible" si se logra agilizar el diagnóstico y garantizar un acceso "oportuno y equitativo" a la atención para todos los pacientes.
A la limitación en el acceso, el estudio añade los retrasos en el diagnóstico como consecuencia de los retrasos considerables en el proceso de derivación. Así, el tiempo medio hasta el diagnóstico de Alzheimer se duplica, alcanzando los cinco meses; en el caso de España y Francia, los pacientes pueden esperar entre seis y siete meses.
RETRASO EN LAS DERIVACIONES A NEUROLOGÍA
Aunque en los casos en los que el diagnóstico lo puede realizar el médico de Atención Primaria (AP) el proceso es más ágil, lo que refuerza el papel clave del primer nivel asistencial, la encuesta revela que la derivación a Neurología sigue siendo lenta. En concreto, en España, no se remite con la suficiente rapidez al 30,8 por ciento de los pacientes con demencia leve y al 34,6 por ciento de quienes presentan deterioro cognitivo leve.
Entre las barreras identificadas por los especialistas para alcanzar un diagnóstico temprano, el 61 por ciento apunta al retraso en la búsqueda de ayuda por parte de los propios pacientes debido al estigma asociado a la enfermedad.
A su vez, el 43 por ciento afirma que los pacientes tardaban en ir a consulta porque no distinguían entre el envejecimiento normal y el deterioro cognitivo causado por la enfermedad de Alzheimer. En España, esta percepción alcanza el 44 por ciento en demencia leve y el 26,2 por ciento en deterioro cognitivo leve.
Los síntomas más comunes que motivan una consulta diagnóstica son pérdida de memoria a corto plazo, las dificultades de concentración/atención y los problemas para recordar nombres o palabras. Aunque suelen ser detectados en primera instancia por un familiar, el estigma y la falta de conocimiento contribuyen al retraso en la búsqueda de ayuda.
"PANORAMA PROFUNDAMENTE PREOCUPANTE"
"Estos resultados dibujan un panorama profundamente preocupante sobre el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer en Europa y reflejan, tristemente, la experiencia de muchos pacientes y familias, que a menudo permanecen demasiado tiempo sin respuestas", ha apuntado la directora ejecutiva de Alzheimer Europe, Jean George.
Según la experta, aplicar de forma urgente las lecciones derivadas de esta investigación y reconocer la enfermedad de Alzheimer como uno de los principales retos de salud pública mejorando el acceso a pruebas innovadoras, aumentando el número de especialistas y fomentando la concienciación social, abriría la puerta a que más personas reciban un diagnóstico y apoyo cuando más lo necesitan.
El vicepresidente asociado de Asuntos Médicos Internacionales en Eli Lilly, Stéphane Epelbaum, ha destacado las oportunidades que ofrecen las terapias emergentes, pero ha insistido en que para que sean eficaces es necesaria una detección temprana.