MADRID 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Medicina Nuclear e Imagen Molecular (SEMNIM) ha advertido de que la rápida expansión de la terapia con radiofármacos en la práctica clínica está generando un "importante reto asistencial" para los servicios de medicina nuclear, por lo que ha resaltado la necesidad de adaptar los circuitos asistenciales y reforzar la disponibilidad de unidades de terapia ambulatoria en los centros sanitarios.
Así se ha mostrado la presidenta de la SEMNIN, Virginia Pubul, durante las jornadas 'Presente y futuro de la terapia con radioligandos', organizadas por la Sociedad Madrileña de Medicina Nuclear (SMMN).
"Las unidades de terapia ambulatoria se han convertido en un elemento clave para ampliar la capacidad asistencial sin incrementar la ocupación hospitalaria", ha indicado Pubul, quien ha añadido que este modelo "permite agilizar los tratamientos, mejorar la experiencia del paciente y optimizar los recursos disponibles, favoreciendo un acceso más equitativo a estas terapias".
Además, ha añadido que estas unidades "contribuyen a reducir listas de espera y a utilizar de forma más eficiente al personal especializado, lo que es fundamental en un contexto de demanda creciente".
El aumento de tratamientos con radiofármacos y la complejidad de su administración están obligando a los servicios de medicina nuclear a reorganizar infraestructuras y circuitos. La SEMNIM señala que las unidades de terapia ambulatoria permiten absorber esta creciente demanda con mayor eficiencia y sin necesidad de ingreso, garantizando un manejo seguro y ágil de los radiofármacos.
"La terapia con radiofármacos ha dejado de ser experimental para convertirse en una realidad de la medicina de precisión. Su despliegue "necesita algo más que innovación científica; requiere infraestructura específica, profesionales formados, un marco regulatorio más ágil y la organización de nuestra actividad desde una visión más clínica y asistencial", ha señalado el coordinador de la jornada, Sebastián Ruiz Solís, del Hospital Universitario 12 de Octubre.
Por su parte, la presidenta de la SMMN, Lina García-Cañamaque, ha coincidido en la necesidad de avanzar hacia un modelo ambulatorio, recordando que supone "un cambio importante" respecto al ingreso tradicional y "una estrategia eficaz para aumentar la capacidad asistencial".
"Esta modalidad optimiza los circuitos asistenciales, reduce la necesidad de hospitalización y mejora la eficiencia y el confort del paciente", aunque su implantación exige ajustes estructurales que varían según cada centro.
'RHENIUM SCT': UN RADIOFÁRMACO CON CRECIENTE INTERÉS TERAPÉUTICO
El programa científico de las jornadas ha incluido un taller práctico centrado en el procedimiento terapéutico con 'Rhenium SCT', un producto sanitario de medicina nuclear que está despertando gran interés por su capacidad para ampliar indicaciones y avanzar hacia tratamientos más personalizados.
Durante el taller, los especialistas han revisado el proceso completo, desde la selección de lesiones y la planificación, hasta la dosimetría y la gestión de residuos.
"El 'Rhenium SCT' ha demostrado una elevada eficacia terapéutica en tumores no melanocíticos" y que se trata de "una alternativa que puede administrarse de forma relativamente sencilla y con un perfil de seguridad muy favorable", ha apuntado García-Cañamaque.
No obstante, ha advertido de los límites actuales para su implantación generalizada debido al coste del equipamiento requerido, por lo que consideró fundamental "promover la colaboración entre centros y avanzar hacia unidades de referencia".
Por su parte, Pubul ha destacado que el 'Rhenium SCT' "representa una oportunidad real para ampliar el alcance terapéutico de la medicina nuclear en patologías dermatológicas, un ámbito donde hasta ahora la especialidad tenía un papel limitado". Además, ha recordado que las indicaciones aprobadas actualmente "son el carcinoma basocelular y el carcinoma epidermoide", pero "el potencial de este radiofármaco va mucho más allá".
La sociedad científica insiste en que la consolidación de estas terapias requiere abordar varios retos estructurales. Entre ellos, garantizar el suministro de radioisótopos en un contexto global con recursos limitados; actualmente existen unos 25 reactores y 1.300 ciclotrones dedicados a la producción médica. También considera necesario agilizar y optimizar los procesos regulatorios, reduciendo los tiempos entre la autorización, financiación e inclusión en cartera de servicios para nuevos radiofármacos; armonizar la optimización de dosis y asegurar una correcta implementación clínica.