SEHH pide diferenciar al paciente inmunosuprimido de la población general y extremar precauciones ante la COVID

Archivo - Gente en el metro con mascarilla.
Archivo - Gente en el metro con mascarilla. - ISTOCK - Archivo
Publicado: jueves, 7 abril 2022 17:57

MADRID, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y desde el Grupo Español de Trasplante Hematopoyético y Terapia Celular (GETH-TC) considera necesario diferenciar al paciente inmunosuprimido de la población general y pide mantener la alerta y poder disponer de circuitos de muestreo y manejo de la COVID-19 específicos para este tipo de pacientes.

Aunque los datos recientes de infección por SARS-CoV-2 en pacientes hematológicos también sugieren una reducción de la severidad, la mortalidad sigue siendo elevada, en torno
al diez por ciento. Esta elevada mortalidad se justifica por el estado de inmunosupresión profunda de estos pacientes y por la menor respuesta tras la vacunación, incluso tras recibir 3 y 4 dosis de
vacunas frente a la COVID-19.

Por ello, demandan extremar o las precauciones de cara a
limitar al máximo los contagios. Sin embargo, reconocen que los datos actuales indican una menor severidad de la COVID-19 (menores tasas de ingreso hospitalario, neumonía, requerimiento de oxígeno, ingreso en UCI y mortalidad) en parte justificado por la alta tasa de vacunación, por las mejoras en el tratamiento de soporte y
disponibilidad de tratamientos específicos y por la más que probable atenuación de las nuevas variantes de preocupación del SARS-CoV-2 (en particular ómicron).

Ante esta situación, proponen que el personal sanitario mantenga
las medidas de protección (aislamiento de contacto y gotas) cuando atienda a un paciente inmunosuprimido en salas de hospitalización (guantes, bata y mascarilla) y mascarilla y lavado de manos en
consultas externas. Además, señalan que las áreas de hospitalización y hospital de día se mantengan libres de COVID-19.

Asimismo, reclaman mantener el muestreo de SARS-CoV-2 por PCR en paciente hematológico y cuidador previo al ingreso hospitalario, independientemente del motivo del ingreso. También consideran que se debería disponer de un área específica (alejada de las zonas en donde se encuentren pacientes inmunosuprimidos) para muestreo por PCR para estos pacientes.

Los pacientes hematológocios ambulatorios con síntomas infecciosos que requieran valoración, diagnóstico y/o tratamiento serán remitidos a urgencias para su atención prioritaria (valoración de constantes, extracción de analíticas y muestras para microbiología, realización de pruebas de imagen y administración de tratamiento antiinfeccioso urgente) y a poder ser en zonas específicas aisladas del resto de pacientes de urgencias.

Por otro lado, ha destacado como aspectos de especial relevancia clínica que se debe conocer el estado de respuesta serológica a la vacunación del SARSCoV-2 tras 3 o 4 dosis en los pacientes con enfermedades hematológicas neoplásicas de cara a la identificación de aquellos que pudieran beneficiarse de la profilaxis pre exposición del SARS-CoV-2 con anticuerpos monoclonales y afirman que un elevado porcentaje de pacientes hematológicos cumplirán criterios de tratamiento específico de la COVID-19, por lo que se requieren circuitos hospitalarios ágiles de valoración y acceso a la medicación oral.