MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) ha aconsejado que, de cara al verano y con el fin de evitar la aparición de alergias, se documente bien antes de elegir la comida de un hotel o restaurante.
"Enfrentarnos a una carta diferente dificulta la seguridad de la selección. Por ese motivo es importante preguntar siempre cualquier duda para no cometer un error que puede tener consecuencias no deseables. A pesar de que existe una normativa que regula la declaración en la carta de la presencia de los 14 alérgenos obligatorios, es importante comprobarlo preguntando a los trabajadores de hostelería", ha dicho la organización.
Además, prosigue, en verano son más frecuentes las comidas con pescado o marisco, y no solo hay que tener en cuenta la comida que hemos elegido o prevenir la contaminación cruzada en cocina, sino la posible reacción por inhalación de partículas en los casos de alta sensibilidad.
"En los pescados debemos tener en cuenta que si somos alérgicos al Anisakis simplex debemos preguntar, además, si siguen las recomendaciones de congelación previa", ha añadido SEAIC.
Asimismo, ha aconsejado también informarse si el medio de transporte que se puede suponer algún tipo de riesgo porque se repartan comidas en su interior; conocer si en el alojamiento ofrecen menús especiales para alérgicos y si han establecido medidas de seguridad en el comedor para evitar contaminaciones cruzadas; y, en el caso de los menores que acuden a un campamento, informarse de las medidas de seguridad.
Del mismo modo, los expertos de SEAIC subrayan la importancia de evitar las picaduras de himenópteros, optando por colores en la ropa que sean discretos y evitando usar colonias o sprays que puedan atraer la atención de los insectos.
"No espantar o intentar matar a un himenóptero si se posa sobre el cuerpo. Para evitar su picadura se debe mantener la calma, permanecer quieto y hacer movimientos lentos hasta que se aleje. Después del picotazo de un himenóptero, retira su aguijón rápidamente (si es una abeja) con cuidado de no presionar sobre el saco de veneno. Un truco que puede servir es rascar la picadura con una tarjeta. Después se debe aplicar frío en la zona y lavar con agua y jabón", ha destacado.
Finalmente, desde SEAIC se ha aconsejado llevar medicación de rescate, tener el informe médico a mano y conocer el nombre de los alimentos a los cuales la persona es alérgica en el idioma del país que se va a visitar.
