TOLEDO 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha ofrece distintas recomendaciones sobre el uso de los medicamentos en verano, ya que las altas temperaturas pueden influir en los tratamientos prolongados y en especial en los pacientes polimedicados, especialmente, si son de edad avanzada o sufren enfermedades crónicas.
La Dirección General de Salud Pública, Drogodependencias y Consumo recuerda que algunos fármacos pueden agravar un golpe de calor. Entre ellos, se encuentran los que provocan alteraciones de líquidos corporales o trastornos electrolíticos y aquellos que afecta a la función renal.
Es recomendable prestar atención a las personas mayores, especialmente a aquellas en tratamiento con medicamentos neurotóxicos, diuréticos o antiinflamatorios no esteroideos (AINE), ya que pueden ser perjudiciales en caso de deshidratación.
Sanidad y Asuntos Sociales recuerda que los grupos de población más sensibles a las altas temperaturas son las personas mayores, los niños, los lactantes, los enfermos crónicos y las personas dependientes. En cuanto a las personas mayores, es importante que beban agua aunque no tengan ganas, ya que en ocasiones disminuye su capacidad de sentir sed y su capacidad de termorregulación mediante la transpiración.
Se aconseja a los pacientes no tomar ningún medicamento sin consejo médico, incluidos los medicamentos sin receta. Siempre debe ser el médico el que evalúe una reducción o interrupción del tratamiento.
Sanidad recuerda que es posible notificar a la Dirección General de Salud Pública, Drogodependencias y Consumo a través de la página web de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha (www.castillalamancha.es) todas las sospechas de reacciones adversas asociadas al uso de medicamentos.