MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El tumor gástrico es la segunda causa de muerte por cáncer en el mundo ya que suele diagnosticarse en estadios relativamente avanzados, de ahí que los expertos insistan en tener en cuenta posibles síntomas de alerta como la saciedad precoz, las alteración en el gusto por la carne y un adelgazamiento inexplicado.
Así lo ha asegurado el oncólogo Federico González, del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, con motivo de la VI Jornada Oncológica 'Actualización y desarrollo terapéutico en cáncer gástrico' que se celebra este viernes.
Este experto también considera recomendable realizar cribados para la detección del 'Helicobacter pylori' y practicar endoscopias seriadas en aquellos pacientes que por sus antecedentes familiares o personales presenten más riesgo.
Muchos cánceres gástricos de tipo difuso muestran una alteración molecular; en concreto en una molécula que se denomina E-cadherina, y también se conocen otras alteraciones como las que se producen en los genes p53 y p16 o los genes reparadores del ADN.
Asimismo, se sabe que "los pacientes con pólipos tienen más incidencia de cáncer gástrico, así como las personas con historia de gastritis crónica", ha explicado González.
El tratamiento suele combinar cirugía, quimioterapia y radioterapia, según el tipo, localización y extensión del tumor, y en los últimos años el tratamiento molecular personalizado, según los datos genético-moleculares de cada paciente "es especialmente en importante en tumores avanzados", concluye el especialista.