MADRID 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un grupo internacional de expertos ha publicado un artículo en la prestigiosa revista 'British Medical Journal' (BMJ) para exigir a la Organización Mundial de Salud (OMS) una estrategia global que evite la venta de medicamentos falsificados.
La llamada de atención coincide con la conferencia internacional sobre este tipo de productos que celebrará este organismo de Naciones Unidas en Buenos Aires (Argentina), y su objetivo es que se llegue a un acuerdo global en defensa de la salud pública, como el que se ha conseguido para el control del tabaquismo.
Además, la petición surge días después de que la Organización Mundial de Aduanas informara sobre una operación conjunta llevada a cabo en 16 países africanos, donde se encontraron 82 millones de dosis de medicamentos ilegales, entre los que había antipalúdicos, antibióticos, jarabes para la tos, anticonceptivos y tratamientos de fertilidad.
El doctor Amir Attaran, experto en salud pública de la Universidad de Ottawa (Canadá) y su equipo de la Federación Mundial de Asociaciones de Salud Pública, la Federación Internacional Farmacéutica y el Consejo Internacional de Enfermeros han defendido en este artículo en el BMJ que se necesitan medidas internacionales más firmes para combatir el comercio ilegal de medicamentos que, según alertan, "dañan y matan a la gente".
Según la OMS, en los países en desarrollo se calcula que más de 10 por ciento de los medicamentos que circulan pueden ser falsos o de mala calidad.
Los fármacos antimaláricos, dice la organización, son una amenaza grave en regiones de Asia y África, donde más del 35 por ciento de estos medicamentos son falsos.
Según el Instituto de Seguridad Farmacéutica (PSI, por sus siglas en inglés), un organismo financiado por la industria, el problema también es grave en América Latina.
Pero el problema también es una realidad en los países de mayores ingresos, advierten los autores de este artículo, ya que a pesar de que la seguridad está más regulada también se detecta la entrada de fármacos de mala calidad o falsos que causan miles de reacciones secundarias graves e incluso muertes.
Según ha explicado el doctor Attaran a la BBC, aunque los gobiernos y las compañías están en contra de los medicamentos inseguros, es difícil lograr un acuerdo en las medidas a tomar debido a que las discusiones a menudo entran en temas conflictivos como el precio de los fármacos o los derechos de propiedad intelectual.
"Aunque algunos países prohíben, por ley nacional, los medicamentos falsos, no existe un tratado global, lo cual provoca que el crimen organizado pueda continuar sus negocios utilizando los países donde las leyes son menos estrictas o no existentes", ha explicado.