VALÈNCIA 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Valenciana de Reumatología aconseja tomar medidas para paliar los efectos del otoño en pacientes reumáticos ya que en esta época muchas personas con enfermedades reumáticas experimentan un empeoramiento de sus síntomas ya que la humedad y el descenso de las temperaturas son factores que influyen en la intensidad del dolor y la rigidez articular.
Así, el frío y la humedad pueden intensificar el dolor en pacientes con enfermedades como la artritis reumatoide, la artrosis y otras patologías reumáticas. Aunque estos cambios climáticos no influyen en la evolución de la enfermedad, sí pueden empeorar los síntomas, lo que aumenta el sufrimiento de quienes las padecen, señalan desde la sociedad.
Una de las recomendaciones más importantes es mantener el calor. Para ello será necesario el uso de ropa abrigada y proteger las articulaciones con el uso de guantes, gorros y capas adicionales para preenir el aumento del dolor y la rigidez articular.
Además, señala que la actividad física regular es "esencial" para mantener la movilidad de las articulaciones. Se recomienda realizar ejercicios suaves, como caminar o nadar, adaptando la intensidad a la condición física de cada persona, y dejar "el sedentarismo a un lado".
Otro de los consejos es evitar la humedad, por lo que se deben mantener los espacios secos y ventilados ya que ayudan a reducir el impacto de la humedad en las articulaciones. Además, aplicar calor en las articulaciones mediante compresas calientes o baños tibios puede aliviar el dolor y la rigidez.
La alimentación e hidratación son también muy importantes. Así aconsejan seguir una dieta equilibrada y mantenerse hidratado, al igual que controlar el estrés porque "puede exacerbar los síntomas de las enfermedades reumáticas". Para ello, técnicas como la meditación o el yoga pueden ayudar a controlar los niveles de estrés.
ENFERMEDADES REUMÁTICAS MÁS FRECUENTES
Entre las enfermedades reumáticas más frecuentes se encuentran la artrosis, la artritis reumatoide, y los reumatismos de partes blandas, que afectan a estructuras como los tendones, músculos y bursas. Estas patologías, junto con la fibromialgia tienden a recrudecerse con el frío y la humedad, aumentando el número de pacientes que acuden a las consultas en esta época del año.
La presidenta de la SVR, Pilar Bernabéu, ha recalcado al respecto que con la llegada del otoño los pacientes experimentan "una exacerbación" de sus síntomas reumáticos y por ello es "fundamental" seguir las recomendaciones de los especialistas para mantener la calidad de vida y evitar que estos cambios afecten negativamente a la salud de los pacientes.
Además, ha subrayado la importancia de ajustar el tratamiento en esta temporada: "Es importante seguir el tratamiento indicado y acudir a revisión si los síntomas empeoran, ya que muchas veces un ajuste en la medicación o las terapias puede marcar una gran diferencia".