MADRID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
La especialista en reumatología del Hospital Universitario de Bellvitge, la doctora Montserrat Romera, recuerda a las personas con enfermedades reumáticas deben continuar con las pautas de tratamiento prescritas, ya que suspender el tratamiento de forma unilateral por miedo a la Covid-19 y sin antes consultar con un especialista podría tener graves consecuencias.
"Es fundamental que los pacientes con patologías reumatológicas continúen con su medicación, ya que suspender el tratamiento de forma unilateral y sin consultar antes con un especialista podría tener graves consecuencias", señala la experta, quien participa en la campaña 'Cuídate en casa' puesta en marcha por Lilly con el objetivo de ofrecer información y apoyo a las personas con patologías crónicas como la artritis reumatoide.
"Nuestra recomendación es mantener el tratamiento y, ante cualquier brote de la enfermedad o síntoma sospechoso de infección por este nuevo coronavirus, pedir una cita telefónica con el especialista en reumatología habitual o consultar siempre en los teléfonos facilitados por las comunidades autónomas", especifica esta especialista, que señala también que "incluso cabe la posibilidad de que algunos de los tratamientos que reciben tengan cierto efecto protector sobre el desarrollo de la enfermedad o su evolución a formas graves".
Hasta el momento, "no se ha descrito que los pacientes con enfermedades reumáticas que reciban tratamiento biológico o inmunosupresor sean un grupo de riesgo para desarrollar formas más graves de la enfermedad causada por el coronavirus (SARS-Cov-2)". Sin embargo, ante esta situación de incertidumbre, un número importante de especialistas considera razonable considerar a estos pacientes como "de riesgo" y actuar consecuentemente en caso de que se contagien.
Por este motivo, recomiendan a los pacientes quedarse en el domicilio siempre que se pueda, y seguir rigurosamente las medidas de aislamiento recomendadas por las autoridades sanitarias; además, es aconsejable evitar el consumo de alcohol y es absolutamente necesario evitar el tabaco.
Las recomendaciones a seguir son lavarse las manos con frecuencia enjabonándolas, al menos durante 20 segundos; evitar tocarse la boca, la nariz y los ojos; al toser o estornudar, cubrirse boca y nariz con el codo flexionado o con un pañuelo desechable, que después tiremos y no guardemos en el bolsillo; desinfectar las superficies comunes; mantener una distancia de seguridad de más de un metro con otras personas.
De esta forma, señala la doctora Romera, "reduciremos las posibilidades de contagio tanto hacia nosotros mismos como hacia el resto de la población".
Por otro lado, aconsejan seguir unos hábitos de vida saludables que incluyan una correcta alimentación y la práctica de ejercicio físico moderado también pueden ayudar a estos pacientes a encontrarse mejor. Como señala esta especialista, la dieta mediterránea consiste en un elevado consumo de cereales, frutas, verduras, frutos secos y legumbres; el uso de aceite de oliva como fuente principal de grasa; el consumo moderado de pescado, pollo, leche y productos lácteos; la reducción del consumo de carne y productos cárnicos.