Responsable de la Estrategia en Cáncer del SNS apuesta por mejorar la atención psicológica al superviviente del cáncer

Presentación Del Estudio 'Después Del Cáncer'
PLANNER MEDIA
Actualizado: miércoles, 6 julio 2011 16:48

Existen diferencias en la asignación de recursos para este servicio en las distintas autonomías y también en su forma de organizarlos

MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -

El coordinador científico de la Estrategia en Cáncer del Sistema Nacional de Salud (SNS), Josep Borrás, reconoce que la atención psico-oncológica al paciente que ha superado un cáncer tiene "poco recorrido" en la sanidad española y que debería "crecer", aprovechando los mejores modelos de organización que se aplican en las autonomías.

En la presentación del estudio 'Después del cáncer', elaborado por la Fundación Josep Laporte en colaboración con los laboratorios Roche, Borrás ha señalado que, en las comunidades autónomas, hay "variedad de enfoques y modelos" para proporcionar atención psico-oncológica a estos pacientes" y "diferencias" en los recursos asignados a este fin.

Dice Borras que algunas comunidades ofrecen soporte al paciente oncológico dentro del servicio de salud mental y otras como servicios específicos vinculados a oncología. En algunos casos, las asociaciones de pacientes se encarguen de esta tarea. "Tenemos que evaluarlos para ver cuáles son los mejores y aprender de estas diferencias", dice.

Por este motivo, el Gobierno y las autonomías discuten ya --de cara a la evaluación de la Estrategia en cáncer del SNS, que se realizará en 2012-- sobre "los recursos disponibles para este tipo de atención". Asimismo, ahora se está revisando la asistencia a los supervivientes al cáncer en una muestra representativa de pacientes de toda España.

Borrás reconoce que los profesionales de la sanidad "a veces responden de forma arquetípica" a las preguntas que les realizan los supervivientes del cáncer sobre cómo deben cuidarse tras el fin del tratamiento, por ejemplo, sobre cómo deberá ser su dieta en el futuro.

LOS PROBLEMAS ESPECÍFICOS DEL SUPERVIVIENTE

Además, admite que muchos de los procesos de seguimiento que se realizan a este colectivo son "irrelevantes" respecto al cáncer y sus problemas añadidos, pues "el 90 por ciento de las mujeres con cáncer de mama que sufren una recidiva son diagnosticadas por ellas mismas".

Sin embargo, las personas que sobreviven a un cáncer sufren problemas específicos de su nueva condición. Entre las secuelas físicas figura el cansancio y la dificultad para concentrarse, que dificulta su reinserción laboral. Entre las psicológicas, el sentimiento de 'abandono', el miedo a la recaída o la depresión.

Para los expertos, pacientes y familiares de afectados que participaron en el estudio 'Después del cáncer', para atender las necesidades de este colectivo es necesario crear planes de seguimiento continuo estandarizado y unidades o clínicas para supervivientes.

Asimismo, es clave incentivar la investigación en las secuelas específicas de estos pacientes y facilitar su acceso a la atención psico-oncológica. En este sentido, pacientes y familiares destacan la importancia de que existan sistemas de apoyo y consejo, como teléfonos de información, y de que se respalde a las asociaciones de pacientes.

LOS PACIENTES QUE MÁS SOBREVIVEN

Según el presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), Emilio Alba, es importante recordar que 1,5 millones de personas han superado un cáncer, cifra que se podría duplicar para 2020.

"Cada año se registran 220.000 nuevos casos de cáncer, de los que la mitad se curan, por lo que tenemos unos 100.000 nuevos largos supervivientes al año", precisa, reconociendo, no obstante, que no hay ningún estudio que mida con precisión la magnitud de este problema.

En su mayoría, los supervivientes largos al cáncer --quienes han superado los 5 años libres de enfermedad a partir de su diagnóstico-- suelen ser aquellas personas que sufren los tumores más frecuentes y con alta tasa de cura, como los de mama o el cáncer colorrectal.

Asimismo, en este grupo suelen incluirse los pacientes más jóvenes, entre ellos niños y adolescentes, que sufren tumores menos frecuentes, como los linfomas o los tumores genitales.

A su juicio, no se trata de "sanitarizar" a este colectivo de pacientes, que "en su mayoría" no suele sufrir mayores problemas relacionados con el cáncer tras finalizar su tratamiento. El objetivo, dice, es averiguar sus necesidades. La SEOM trabaja ya en un plan integral sobre la atención a estos pacientes que presentará a Sanidad.