MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las mediciones de resonancia magnética (RMN) son tan seguras para guiar la toma de decisiones en una posible cardiopatía coronaria estable (ECC) como el procedimiento invasivo utilizado actualmente, según un estudio liderado por el director del Instituto de Imagen Cardiovascular Experimental y Traslacional de la Universidad Goethe (Alemania), Eike Nagel.
A diferencia del cateterismo cardíaco (la técnica habitual), la RMN no es invasiva, funciona sin radiación ionizante, puede realizarse en 40 minutos y proporciona mediciones directas del flujo sanguíneo al corazón. Para los pacientes con dolor torácico y ECC, el tratamiento depende principalmente de la constricción de las arterias que sostienen el corazón (arterias coronarias).
Esto a menudo se determina mediante un procedimiento invasivo llamado cateterismo cardíaco. Si es necesario, también se mide la presión en las arterias coronarias. La combinación de estos métodos es actualmente el estándar reconocido para la toma de decisiones terapéuticas.
Dentro del estudio internacional 'MR-INFORM', los investigadores examinaron a 918 pacientes con una indicación de cateterismo cardíaco para ver si la toma de decisiones por medio de una resonancia magnética conducía a los mismos resultados que el método invasivo actual.
Los pacientes fueron asignados aleatoriamente a dos grupos. Un grupo recibió la investigación diagnóstica estándar con cateterismo cardíaco y medición de la presión de las arterias coronarias. El otro se sometió a una resonancia magnética del corazón de 40 minutos para decidir si enviaba al paciente a una angiografía invasiva.
En cada brazo de estudio, se dilataron los vasos coronarios estrechos cuando el examen lo indicó. Al año siguiente, los médicos documentaron cuántos pacientes murieron, sufrieron un ataque cardíaco o requirieron una dilatación vascular repetida. Además, registraron si los síntomas cardíacos continuaban.
En el grupo de pacientes examinados por resonancia magnética, menos de la mitad requería un cateterismo cardíaco diagnóstico y menos pacientes recibieron una dilatación vascular (36% frente a 45%). Esto significa que con un examen de RM rápido y no invasivo como primera prueba, se pueden reducir tanto las cateterizaciones cardíacas diagnósticas como las terapéuticas. De manera importante, los dos grupos no difirieron en términos de síntomas continuos, el desarrollo de nuevos síntomas, complicaciones o muertes.
"Esto significa que los pacientes con dolores torácicos estables que anteriormente habrían recibido cateterismo cardíaco pueden ser examinados alternativamente con RMN. Los resultados para los pacientes son igual de buenos, pero un examen por RMN tiene muchas ventajas: el procedimiento dura unos 40 minutos, los pacientes simplemente reciben una pequeña cánula en el brazo y no están sujetos a la radiación", concluye Nagel.