Requisitos para acertar con la compra de las gafas de un niño

Gafas niña
LORD WILDMORE
Actualizado: jueves, 14 julio 2016 14:08

   MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -

   A la hora de elegir las gafas de los más pequeños hay que tener en cuenta varios factores, especialmente psicológicos. Por ello, la marca española de gafas graduadas Lord Wilmore ofrece una serie de consejos a la hora de escoger las gafas adecuadas.

   Si es la primera vez que se compran unas gafas, es importante que estén 'a la moda' para que los niños se vean cómodos con ellas puestas. El factor psicológico en este caso, juega un factor muy importante y hay que saberlo gestionar. Hay que dejar a los niños elegir la montura de sus gafas "de este modo, dejamos que el pequeño elija con tranquilidad desde casa y sin presión de ningún vendedor la montura con la que se sienta más cómodo", ha explicado el fundador de Lord Wilmore, Emilio Capela.

   Es aconsejable elegir la silicona como material de las gafas, ya que es más flexible y evita roturas. En niños mayores de cinco años, Lord Wilmore recomienda las monturas de acetato, porque disimulan mejor el grosor de la lente y suelen ser más difíciles de romper que las monturas metálicas o de plástico inyectado.

   Las gafas deben ser cómodas y menos rígidas para que no les suponga una molestia al llevarlas. Por ello, recomiendan que tanto las varillas como las terminales, parte de la gafa que rodea la oreja, sean flexibles y ajustables. Además, en las varillas es recomendable que se utilice una bisagra con muelle para que no se rompan al ponerse y quitarse.

   Los 'stoppers' en las patillas, abrazan la oreja del niño y hacen que las gafas no se caigan, en lugar de la típica cinta que les pasa por detrás de la cabeza que puede resultar más incómoda", ha señalado el fundador. Es muy recomendable tener un par de gafas por seguridad, ya que pueden romperse realizando cualquier actividad.

   Hay que revisar que las gafas estén bien graduadas y se aconseja realizar revisiones frecuentes a la óptica, cada año o cada vez que el pequeño se queje de no ver bien. También es esencial que las lentes sean biseladas y montadas por profesionales, para asegurar su correcto montaje.