Recomiendan a los estudiantes realizarse revisiones anuales visuales, ya que puede condicionar el rendimiento académico

Gafas
FLICKR/AZRA ABERTISH
Actualizado: domingo, 5 julio 2015 13:55

MADRID 8 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Visión y Vida recuerda a la población la importancia de realizarse al menos una revisión de la vista al año, muy especialmente durante la etapa de escolarización, ya que una mala visión es la culpable del fracaso escolar de uno de cada tres alumnos.

Según el presidente de la organización, Javier Cañamero, durante la presentación de la campaña 'El Fracaso escolar y la Visión', "un examen optométrico exhaustivo evalúa cuál de las habilidades visuales puede estar fallando y busca la solución más adecuada a cada caso". Las gafas, las lentes de contacto, el uso de prismas, y la terapia visual, son algunas de las soluciones que pueden restablecer una visión óptima, que ayudará al alumno a mejorar su rendimiento visual y, por lo tanto, el académico.

Según los datos aportados por el Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas, una mala visión es la culpable del fracaso escolar de uno de cada tres alumnos. Teniendo en cuenta que el 80 por ciento de la información que recibe nuestro cerebro llega por los ojos, el sentido de la vista "es primordial en el desarrollo y aprendizaje del alumno".

Además, estudios realizados por la organización demuestran que uno de cada cuatro estudiantes tiene un problema visual, como la miopía, el astigmatismo, la hipermetropía, el ojo vago, etc.

En palabras de Cañamero, "un buen sistema visual no es solo aquel que es capaz de distinguir las letras más pequeñas, sino que se trata de leer sin cansarse, sin saltarse las líneas, de comprender el significado de la lectura y de ver con nitidez de forma prolongada y constante.

Sin embargo, muchos niños son incapaces, aun teniendo una visión del 100 por 100, de mantenerse más de 10-15 minutos realizando tareas cómo la lectura o la escritura". Esta actitud muchas veces se asocia a la poca disciplina del alumno o déficits de atención, pero "hay que concienciar a los padres y educadores de que muchas veces se debe a un sistema visual que no está preparado para mantener sus ojos fijos a una distancia de trabajo".

La entidad dedicará parte de sus consejos de septiembre en incidir en que los cambios de hábitos en la población infantil y adolescente, que sustituyen las horas de juego al aire libre por las nuevas tecnologías (móviles, ordenadores, tablets), están conllevando un aumento en el número de jóvenes con problemas visuales. Tanto es así que "se prevé que en el año 2020 el 33 por ciento de los adolescentes sean miopes, como consecuencia de la utilización inadecuada de estos aparatos".