MADRID 26 May. (EUROPA PRESS) -
El hipofraccionamiento en Radioterapia Clínica, es decir, la aplicación de mayores dosis diarias de radiación en menos sesiones totales, está logrando imponerse "con éxito" en el tratamiento de tumores como el de recto, los gastrointestinales y el de páncreas.
Así lo ha asegurado el director Médico del Grupo IMO, Ignacio Azinovic, con motivo de la 'Jornada de Hipofraccionamiento en Radioterapia Clínica', organizada por la Fundación Grupo IMO. Allí, el experto ha informado de que este avance se ha producido gracias a la alta tecnología de los equipos radioterápicos, como el 'CyberKnife' o la Tomoterapia, que permiten una mayor precisión terapéutica y minimizar los efectos secundarios en órganos sanos próximos a la lesión.
"Gracias al hipofraccionamiento estamos logrando numerosos avances para que los tratamientos radioterápicos sean cada vez más cortos y eficaces, se constituyan en muchos casos como una alternativa a la cirugía, con excelentes resultados de control local de la lesión tumoral y de supervivencia, minimizando los efectos secundarios y logrando reducir considerablemente el número se sesiones con el consiguiente beneficio en calidad de vida para los pacientes", ha aseverado Azinovic.
En este sentido, el especialista ha explicado que en el cáncer de mama se han reducido de 25 sesiones de tratamiento radioterápico a 15 y, aunque depende del volumen mamario, la mayoría de pacientes se pueden beneficiar del hipofraccionamiento.
"Uno de los avances y nueva posible indicación de esta modalidad terapéutica aplicada al cáncer de mama es su eficacia cuando se aplica a mujeres a las que se les ha diagnosticado un carcinoma 'in situ', que son lesiones no invasivas que cada vez se diagnostican más debido a las campañas de diagnóstico y detección precoz de este tipo de tumores", ha apostillado.
Otra patología en la que se está imponiendo el tratamiento radioterápico con hipofraccionamiento es en el cáncer de próstata donde de 38 o 40 días de tratamiento con protocolos y técnicas convencionales, se ha logrado reducir a 28 sesiones, a quince sesiones e incluso a cinco sesiones dependiendo de las características del tumor y de la tecnología que se disponga.
El primer paso se dio con los aceleradores más convencionales con los que se logró rebajar a 28 días, pero los mayores avances se han logrado con la aplicación de los nuevos equipos de alta tecnología como Tomoterapia y 'CyberKnife'.
"En el caso de la Tomoterapia se reducen las sesiones de radiación a quince días y está indicada para pacientes con tumores precoces de próstata y que tengan una buena función urinaria. Con 'CyberKnife' el tratamiento se reduce a tan sólo cinco días y también está indicado para pacientes con las mismas características que en el caso anterior. La elección de una u otra técnica llamadas IGRT y SBRT dependerá de la disponibilidad tecnológica de cada centro", ha aseverado el especialista del Grupo IMO.
TUMORES DE RECTO, GASTROINTESTINALES, PÁNCREAS Y VEJIGA
Asimismo, otras lesiones en las que se está aplicando con éxito el hipofraccionamiento es en determinados cáncer de recto y tumores gastrointestinales, aunque los especialistas consideran que es preciso completar más estudios para consolidar la evidencia terapéutica de este procedimiento.
"En tumores de recto que están alejados del esfínter anal y son moderadamente avanzados, y como paso previo a la cirugía, se pueden realizar tratamientos hipofraccionados de Radioterapia en cinco días, con lo que así podríamos evitar terapias combinadas de quimioterapia sensibilizante asociada a Radioterapia que son más incómodas para el paciente", ha apostillado.
Otra nueva indicación del hipofraccionamiento, todavía en fase experimental, es en tumores de páncreas irresecables quirúrgicamente, bien por el tipo de tumor o porque afecta a otras estructuras. En estos casos, tal y como ha analizado, se aplica entre diez o quince sesiones de Radioterapia con el objeto de lograr el control local de la enfermedad e incluso reducir el tamaño del tumor para poder convertirlo en una lesión operable.
"De todas formas, es necesario seguir avanzando en los estudios clínicos para consolidar la eficacia y los beneficios del hipofraccionamiento para los pacientes con tipos de tumores antes mencionados y, además, explorar su validez en otras localizaciones como tumores de vejiga, cerebrales y los que afectan a la esfera de ORL, como el cáncer de laringe", ha zanjado.