SAN SEBASTIAN 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los enfermeros guipuzcoanos Juan Manuel Domínguez y Kontxi Argaya, que acaban de volver de Haití donde, junto con otros 17 profesionales de este sector procedentes de Gipuzkoa, han participado en labores humanitarias tras el terremoto que asoló este país centroamericano el pasado 12 de enero, pidieron a la sociedad que no se olvide de las víctimas de esta catástrofe sumidas en el "caos".
En una rueda de prensa en San Sebastián, Domínguez y Argaya, compañados de la presidentea del Colegio Oficial de Enfermería de Guipúzcoa, María Jesús Zapirain, y de la presidenta de la ONG Haurralde, Patricia Ponce, relataron su experiencia en Haití a donde acudieron en respuesta al llamamiento realizado por el citado Colegio a instancias de Haurralde.
En total, desde el terremoto del pasado 12 de enero, un total de 19 enfermeros y cinco trabajadores sociales guipuzcoanos se han desplazado a Haití, por periodos de un mes y en grupos de seis o siete personas, para ayudar a las víctimas del seísmo.
Argaya consideró que ha sido "una suerte" poder vivir esta "increíble" experiencia, dónde se ha tenido que hacer frente a todo tipo de "urgencias". Según explicó el primer punto de partida para desarrollar su labor fueron los campamentos de Puerto Príncipe ya que actualmente aproximadamente un millón de personas vive en las calle, sobre plásticos y cartones, de la citada ciudad haitiana. A partir de ahí se desplazaron al Hospital de la Comunidad Haitiana, en el barrio de Pétionville y después al derruido orfanato de Leogane.
En estos momentos la organización local MUDHA está tramitando la compra de terreno para levantar un nuevo centro donde dar cobijo a los niños huérfanos y aquellos que, tras el terremoto, se desconocen si tienen familia que se haga cargo de ellos pero que, en cualquier caso, Haurralde descarta se den en adopción.
Argaya señaló que aquí "tenemos muchísimo para repartir" en Haití, e instó a la sociedad a que colabore, porque hacen falta mucho material. En este sentido, Domínguez destacó que Haití "tardará 25 o 30 años" en recuperarse, algo que "no está en la opinión pública", y lamentó que "faltan infraestructuras", para que este país salga del "caos" en el que se encuentra.
Además, destacó la labor que están llevando a cabo algunos jóvenes haitianos universitarios como traductores para los voluntarios que acuden a prestar labores humanitarias y lamentó que muchos de ellos se están viendo obligados a abandonar el país ante la imposibilidad de poder seguir estudiando allí.
RECURSOS HUMANOS
Sobre esta cuestión, Ponce subrayó que uno de los retos para Haurralde es tener "recursos humanos" y así está intentando que aquellos profesionales que en su día se marcharon de Haití a la República Dominicana vuelvan para recomponer el país.
Por otro lado, Domínguez advirtió que Haití se enfrenta en los próximos meses a "un nuevo terremoto, la época de lluvias y de huracanes" que conllverá probablemente un nuevo problema humanitario ya que "es imposible que la reconstrucción total se lleve a cabo en un año".
Asimismo, destacó la "enorme riqueza" de Haití que "ha tenido la desgracia de estar perdido en el mundo" y se mostró convencido de que tras el terremoto puede tener "una oportunidad para salir de la pobreza" en la que ya estaba sumido antes de este desastre natural. Los interesados en conocer en profundidad la labor de los enfermeros guipuzcoanos en Haití pueden consultar el blog 'http://emergenciaenhaití.wordpress.com/about/' así como la web de Haurralde.