Los pacientes son cada vez más jóvenes y el colectivo incide en la atención a perfiles emergentes y dedicar más recursos a enfermedad grave
MADRID, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los psiquiatras detectan un incremento del número de consultas relacionadas con problemas derivados de la vida cotidiana (como ansiedad, estrés, depresión o problemas de rendimiento escolar o laboral entre otros), un aumento de pacientes con patología dual y personas cada vez más jóvenes.
Por otro lado, se aprecia una sobrecarga asistencial, falta de tiempo de dedicación en consulta, falta de plazas para pacientes crónicos y la situación de la lista de espera, lo que se une a una "rigidez" organizativa que dificulta la implantación de nuevos modelos de asistencia.
Así lo indica la encuesta elaborada por la Sociedad de Psiquiatría de Madrid que se ha dado a conocer durante la presentación del Libro Blanco de Atención a la Salud Mental de la Comunidad de Madrid, que cuenta con el apoyo de Janssen Pharmaceutical Companies of Johnson & Johnson.
Las conclusiones de este documento y su encuesta (realizada entre profesionales y asociaciones de pacientes y familiares) han sido presentadas por la presidenta de la Sociedad de Psiquiatría de Madrid y responsable de la Unidad de Trastorno de Conducta Alimentaria y de la Unidad de Intervención Precoz en Psicosis del Hospital Clínico, Marina Díaz, y el vocal de la sociedad y jefe del servicio de Psiquiatría del Gregorio Marañón, Celso Arango.
Este estudio expone que un 80 por ciento de los consultados aprecia un incremento de consultas ocasionadas con problemas de la vida cotidiana, un aspecto que dificulta la dedicación de mayor tiempo a pacientes con patologías más graves.
Por otro lado, el 69 por ciento de los consultados detecta perfiles emergentes como trastorno de personalidad y la conducta. Por otro lado, el 53 por ciento aprecia un aumento de pacientes con patología dual y trastornos adaptativos y un 45 por ciento opina que los pacientes son cada vez más jóvenes.
A su vez, el 43 por ciento nota que el paciente que acude tiene mayor acceso a información y un 27 por ciento ve aumento de consumo de tóxicos en pacientes psicóticos. Por otro lado, un 10 por ciento de pacientes psicóticos cada vez de menor edad. Además, Arango ha señalado que el 90 por ciento de los pacientes con trastornos psicóticos consumen sustancias tóxicas.
En este sentido, el documento concluye la necesidad de disponer de mejores recursos específicos para pacientes crónicos, mejor coordinación entre los servicios de salud mental y los servicios sociales y educativos, el desarrollo de sistemas de atención de patologías emergentes, mejor dotación de recursos de hospital de día, campañas de sensibilización y concienciación de la enfermedad mental, mejor dotación de recursos sanitarios de media estancia y detención precoz impulsando la formación en colegios con implicación en Atención Primaria.
A su vez, un 69 por ciento de los consultados aprecia sobrecarga asistencial como un condicionante de la calidad de la asistencia en salud mental, unido a la situación de las listas de espera (64%), necesidad de programas específicos (60%), falta de plazas para pacientes crónicos (50%), falta de tiempo de dedicación a la consulta (44%) y falta de criterios claros de derivación a la Atención Especializado (33%).
Por otro lado y en materia organizativa, un 46 por ciento alude a la separación entre la red sanitaria y social (que debe tener mayor continuidad), falta de coordinación con otros sectores (42%) y falta de un marco homogéneo de actuación por parte de las gerencias (35%).
En materia de condiciones laborales, el 73 por ciento de los encuestados apuntan a una excesiva carga de trabajo y falta de personal en los equipos, unido a ratios "insuficientes" de profesional por número de pacientes (42%).
Por otro lado, el 55 por ciento afirma que la carencia de plazas de hospitales de días es el mayor problema a nivel de recursos, unido a la falta de recursos para pacientes crónicos (43%) y falta de equipos de intervención en casos complejos (28%).
Mientras, el doctor Arango ha subrayado también que el 50 por ciento de los consultados asegura que no utiliza las guías clínicas elaborados en materia de enfermedad mental, lo que dificulta una actuación homogénea en la asistencia.
EVOLUCIÓN DE LOS RECURSOS EN SALUD MENTAL
El informe también realiza una evolución de los recursos asistenciales en la Comunidad de Madrid, con un aumento del 7,25 por ciento en el número de camas en hospitales psiquiátricos en la Comunidad de Madrid para el periodo 2010-2013.
Por otro lado, la Comunidad de Madrid se encuentra en el noveno lugar de las autonomías en términos de ratio de camas de psiquiatría por cada 100.000 habitantes, con una media de 37 camas, aún lejos del ratio de 84 camas que presenta el País Vasco y de la ratio de 50 camas de psiquiatría recomendado por el Treatment Advocacy Center.
A su vez, el ratio de camas destinadas a la asistencia psiquiátrica en hospitales de larga estancia se sitúa en 29 camas por cada 100.000 habitantes y el caso de agudos es de siete camas.
Además, en 2013 la Comunidad contaba con un plantilla de 10,85 psiquiatras por cada 100.000 habitantes, por encima de la media nacional (8,08), aunque en el caso de psicólogos clínicos estaba por debajo de la media nacional, con un 1,88 por cada 100.000 habitantes (cuando la media estatal es de 2,19). La región también cuenta con un ratio inferior a la media nacional respecto a enfermeros por cada 100.000 habitantes en centros de salud mental.
En relación al análisis de la actividad ambulatoria, la Comunidad de Madrid se sitúa por encima de los valores estatales con un mayor número de consultas de psiquiatría, tanto en primera ocasión como de seguimiento.
No obstante, en el ratio de consultas sucesivas sobre la primera en hospitales de la región, en 2014 se detectó una disminución de dos puntos en relación a 2010, al pasar de 6,84 a 4,86.
La presidenta de la Sociedad de Psiquiatría de Madrid ha recalcado que las conclusiones de este Libro Blanco son útiles para diseñar un nuevo plan de salud mental en la región y expone que, ante el aumento de consultas derivados de problemas cotidianos de la vida, se requieren más programas para filtrar estas situaciones a la hora de derivar al especialista.
También ha incidido en la estrategia de prevención para la etapa infantil y la adolescencia, así como evitar situación de "sobrecarga" en los profesionales. Además, Arango ha incidido en la necesidad de contar con profesionales especializados en los servicios de atención a la salud mental, una situación que no se produce en ocasiones en el caso de la enfermería.
EL ACOSO ESCOLAR MULTIPLICA EL RIESGO DE ENFERMEDAD MENTAL
A su vez, el jefe de la unidad del Gregorio Marañón ha detallado que los trastornos mentales en la etapa de 10 a 30 años es el factor de mayor discapacidad, por encima del resto de patologías.
Díaz también ha incidido en la conveniencia de estrategias específicas para fomentar la reintegración de pacientes con enfermedad mental en la vida laboral.
Por otro lado, Arango ha señalado que el acoso escolar es un elemento relevante en materia de salud mental, dado que multiplica por dos el riesgo de patología psiquiátrica y por tres el riesgo de suicidio. También ha señalado que hay más personas con transtorno mental no tratados que tratados.
A su vez, la presidenta de la sociedad ha señalado que el trastorno de conducta alimentaria se producen de forma más temprana por la "presión social".