MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla recomienda que cuando se sufra una quemadura ocular es necesario lavar de inmediato con agua el ojo afectado, sin demasiada fuerza y separando bien los párpados, con el objetivo de evitar que la lesión pueda agravarse.
Con motivo de las hogueras típicas de la Noche de San Juan que se celebra en este jueves, este centro aconseja también no usar sustancias distintas al agua ya que pueden empeorar el problema y recuerda la importancia de acudir a un centro especializado para una revision urgente de la estructura interna del ojo.
Si se producen pequeñas abrasiones por cuerpos extraños como arena, humo o cenizas, la persona accidentada debe parpadear repetidamente para intentar expulsar el cuerpo extraño. Asimismo, desaconseja intentar retirar el cuerpo extraño ya que puede provocar rasguños en la superficie del ojo.
Y en caso de que la lesión tiene lugar por un golpe en la parte exterior del ojo (parpado o ceja), es importante hacer presión en la zona dañada para cortar la hemorragia, sin llegar a aplicar excesiva fuerza.
Además, en caso de ojo morado se deberá aplicar hielo o compresas frías durante las primeras 24 horas para intentar reducir la hinchazón, manteniendo la cabeza elevada para que la inflamación pueda bajar.
Desde este centro especializado también ofrecen una serie de consejos en caso de participar en hogueras u otra celebración vinculadas al fuego, tales como usar gafas de protección, evitar colocar petardos en el interior de recipientes, fabricar cohetes caseros y lanzarlos en alto; mantener un perimetro de seguridad; no cogerlos hasta media hora después de su lanzamiento en caso de no explosionar; y no usar lentillas ya que el humo reseca los ojos y se puede dañar la superficie de la cornea.