MADRID 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Española de Urología (AEU), el Grupo de Grupo de Tumores Genitourinarios de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (URONCOR), la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y la Asociación de Cáncer de Próstata (ANCAP) han constituido un grupo de trabajo multidisciplinar con el fin de elaborar un documento de consenso para mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer de próstata.
El propósito de este grupo, coordinado por el doctor Antoni Vilaseca, médico adjunto del Servicio de Urología del Hospital Clínic de Barcelona, es mejorar la experiencia de los pacientes teniendo en cuenta todas las vertientes de la atención, desde el diagnóstico y el tratamiento hasta después del mismo, con perspectiva a largo plazo y contando con las implicaciones que la enfermedad tiene también desde el punto de vista social y de la salud mental, entre otros aspectos.
Este proyecto pretende establecer un marco integral, sostenido y centrado en el paciente que abarque todas las fases de la enfermedad. Además, que funcione como referencia e instrumento para impulsar cambios reales en el modelo asistencial, además de visibilizar las necesidades específicas de las personas que tienen este tumor, que es el más frecuente en los hombres en España.
"Este tipo de cáncer, que se caracteriza por tener un crecimiento relativamente lento y ser asintomático en las fases iniciales, puede suponer un gran reto para los profesionales sanitarios. Este documento, por tanto, supone una oportunidad única de construir un marco de atención que tenga en cuenta todos los aspectos clínicos y del bienestar global del paciente para ofrecer el mejor manejo posible", afirma el doctor Antoni Vilaseca, médico adjunto del Servicio de Urología del Hospital Clínic de Barcelona y coordinador del Grupo de Trabajo.
Una vez establecidas las necesidades y el análisis del estado actual del abordaje del cáncer de próstata en España, los participantes del Grupo de Trabajo, debatirán en múltiples sesiones acerca de las principales propuestas de cambio, abordando cuestiones clave como la detección precoz, la personalización de tratamientos, el acompañamiento biopsicosocial del paciente y la familia, la multidisciplinariedad en el manejo y la toma de decisiones, y el impacto de la enfermedad en la vida diaria del paciente.