MADRID 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Asociación Mundial de Rehabilitación Psicosocial (WAPR, por sus siglas en inglés), Ricardo Guinea, ha abogado este viernes por dejar que los enfermos mentales tengan el control de la situación y puedan tomar sus propias decisiones para avanzar en su proceso de recuperación. De esta manera, ha afirmado que la recuperación es "posible" en estas patologías.
Este experto ha señalado, durante la 'IX Jornada Anual de Atención integral a personas con enfermedad mental' de la Fundación Manantial, que hay que evolucionar del modelo de consulta médica experto-ignorante, que resulta tan "insatisfactorio" para los usuarios, hacia uno más equitativo.
A su juicio, el paciente debe tener libertad de elección, en la medida de lo posible, para poder tomar sus propias decisiones. En este sentido, ha reconocido que los enfermos se las saben "apañar muy bien" y utilizan de manera "razonable" los recursos de los que disponen.
Asimismo, ha creído conveniente que los profesionales y las familias de los pacientes mantengan las expectativas de las personas enfermas y que los sanitarios eviten las intervenciones rutinarias, consideradas "dañinas" por las mismas.
No obstante, ha reconocido que existen factores como un entorno familiar adecuado, una actitud positiva y un comportamiento social normal que influyen en la recuperación del afectado.
En líneas generales, Guinea ha aconsejado que, una vez diagnosticada la enfermedad, no se debe "medicalizar" la situación, es decir, que la vida del paciente gire en torno a ella, y ha apostado por llevar una vida normal, con su trabajo, pareja y vida social.
IMPORTANTE IMPACTO
Estas enfermedades, ha dicho, tienen un impacto importante en las personas que lo sufren porque reducen su esperanza de vida, están expuestas al desempleo, sufren los efectos secundarios de los medicamentos y tienen que enfrentarse a la estigmatización social.
El secretario de WAPR ha informado también de que la sociedad cada vez es más consciente del impacto que producen estas patologías en la sociedad. "Inciden en el Producto Interior Bruto y en el sufrimiento de las personas", ha precisado.
No obstante, Guinea ha mostrado su satisfacción de que, durante las últimas décadas, haya mejorado la situación de los centros hospitalarios y la actitud de los cuidadores. También ha reconocido que la investigación es ahora más "duradera" en el tiempo y más personalizada, lo que permite que los profesionales conozcan "lo que ayuda y lo que obstaculiza" la recuperación del paciente.
En este sentido, ha destacado la importancia de dar voz a las personas que han sufrido esta enfermedad para que puedan ser escuchadas y servir como ejemplo. De esta manera, ha abogado por dar a conocer el éxito de las diferentes asociaciones de usuarios que existen en el mundo.
Finalmente, el experto ha denunciado, basándose en datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que todavía existen bastantes personas en el mundo, especialmente en países en vías de desarrollo, que no tienen acceso a parte del tratamiento básico para superar este tipo de enfermedades.