MADRID, 22 Ago. (INFOSALUS) -
Existen preocupaciones de salud muy comunes y consideradas en ocasiones menores o asociadas a la edad y que pueden tener importantes consecuencias sobre nuestra calidad de vida y salud global. Apuntamos algunos consejos para abordar estos 'delicados' temas con el médico.
"Nuestros cuerpos son inteligentes. Nos advierten de problemas graves de salud años antes, con un poco de atención, si se detecta de forma precoz, pueden tratarse con la ayuda de un médico", señala la geriatra de la Johns Hopkins Alicia Arbaje, que advierte que no hay que considerar estos síntomas una cuestión de edad.
Los especialistas de la institución médica americana señalan desde su web dirigida al público síntomas, consecuencias y consejos para abordar con el médico estos problemas de salud no tan menores:
1. Incontinencia urinaria
Si experimentas pérdidas cuando estornudas, te ríes, levantas algo pesado o realizas ejercicio. O pueden presentarse 'accidentes' porque la urgencia de orinar te supera, tan rápido, que no te da tiempo a llegar al baño.
"La incontinencia urinaria afecta a la calidad de vida. Podría limitar tu vida social y sólo acudir a lugares con un baño cerca o quedarte en casa", apunta Arbaje.
Algunas veces, la incontinencia urinaria es un signo de un trastorno de salud que necesita tratamiento, como una infección del tracto urinario, artritis o un problema de los músculos del suelo pélvico. También puede ser un efecto secundario de algunos medicamentos. A menudo, cambios en el estilo de vida y ejercicios de suelo pélvico adecuados pueden ayudar.
Cuéntale al médico una situación reciente en la que tuvieras problemas para aguantar la orina o incluso cambiar tu ropa interior. Si comienzas a limitar actividad para estar cerca de un aseo, coméntaselo a tu médico.
2. Estreñimiento
Los movimientos intestinales duros y secos y menos de tres veces por semana son un signo de estreñimiento. También puede que te cueste o incluso notar alguna vez sangre en las heces.
"El estreñimiento puede ser incómodo e incluso doloroso", señala Arbaje. Produce hemorroides y otras complicaciones, algunas pueden ser muy serias, como confusión en las personas mayores. También puede ser un signo de síndrome de intestino irritable o del funcionamiento intestinal, o una advertencia de que la dieta necesita más fibra y líquidos o un uso excesivo de laxantes.
Habla con tu médico sobre la frecuencia con la que vas al cuarto de baño. Pregúntale si deberías hacer o tomar algo especial para ayudar al tránsito intestinal.
3. Problemas sexuales
Si se experimenta dolor en las relaciones, problemas para conseguir o mantener la erección o un bajo deseo sexual.
"Los problemas sexuales pueden tener un impacto en tu relación de pareja y por ello en la calidad de tu vida diaria. Nunca eres demasiado mayor para disfrutar una vida sexual satisfactoria", señala Arbaje.
Los problemas sexuales podrían también ser una señal de la necesidad de recibir tratamiento por depresión, diabetes, problemas circulatorios o niveles hormonales bajos o de que estás tomando una medicación que te causa efectos secundarios.
4. Depresión
Los síntomas incluyen sentir poca energía, irritabilidad y una carencia de interés en las actividades que sueles disfrutar, además de problemas de apetito y sueño.
La depresión hace la vida cotidiana difícil y que cuidar de tu salud (seguir una dieta sana, hacer ejercicio, dormir lo suficiente y tomar los medicamentos de la forma adecuada) sea un reto aún mayor. También podría ser un signo de advertencia de que tu nivel de estrés es demasiado alto, que un medicamento está ocasionando efectos secundarios o si sufres la pérdida de un familiar o amigo.
Hay que explicarle al médico que no te sientes como antes en los últimos tiempos y describirle lo que habéis notado tú o tus familiares sobre tu estado de ánimo.
5. Problemas de memoria
Se trata de si experimentas problemas al recordar nombres, fechas y otros datos, dificultad para encontrar las palabras que necesitas cuando hablas o escribes, problemas de concentración o incluso para recordar lo siguiente que tienes que hacer.
Hay que tener en cuenta que muchas personas experimentan más lapsus de memoria a medida que envejecen y la mayoría de ellos son normales. Pero los lapsus que afectan a la habilidad para cuidar de uno mismo podrían tener impacto sobre la capacidad para vivir de forma independiente o para conducir un coche. Los cambios en la memoria pueden también ser un signo de advertencia de la depresión y los problemas del sueño.
Describe a tu médico la clase de problemas que estás teniendo con tu pensamiento y memoria. Pregunta si tu médico puede hacer una prueba sencilla de tus habilidades mentales en la consulta.