MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo informe del Centro Europeo para la Prevención y el Control de enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) sobre 'El impacto de la pandemia del Covid-19 en la respuesta al VIH en Europa y Asia Central', que cubre los años 2021 y 2022, ha señalado que la prestación de servicios de VIH en Europa y Asia central se vio gravemente afectada durante la pandemia de COVID-19, sobre todo la realización de test.
Este documento proporciona información importante sobre los desafíos que enfrentan los países para mantener los servicios esenciales de VIH en medio de la crisis sanitaria mundial. Aunque en 2022 menos países informaron de una reducción en la prestación de servicios en todos los servicios específicos para el VIH que en 2021, el impacto aún se siente en comparación con los niveles prepandémicos.
De todos los servicios específicos del VIH, las pruebas del VIH en las clínicas y en la comunidad experimentaron el mayor impacto debido al Covid-19. Además, la mayoría de los países también informaron que los servicios de prevención no específicos del VIH, incluidos los servicios relacionados con otras infecciones de transmisión sexual, la distribución de preservativos, la reducción de daños para las personas que se inyectan drogas y la extensión general de prevención, se redujeron gravemente.
Las reducciones en los servicios como resultado del Covid-19 se debieron más bien a desvíos de personal y recursos de las instalaciones de los servicios de VIH para apoyar la respuesta a la pandemia, más que a desafíos financieros. Solo una cuarta parte de los países que informaron dijeron que se habían desviado fondos de la respuesta al VIH en 2021, mientras que más de las tres cuartas partes informaron desvíos de personal e instalaciones clínicas.
Si bien los países informaron de un impacto considerable en la capacidad de las instituciones de salud pública, la mayoría señaló que la recopilación de datos de vigilancia en general no se había visto afectada. El impacto en los sistemas de salud pública debe medirse a lo largo del tiempo para evaluar si se han recuperado o si continúan experimentando efectos duraderos como resultado del periodo de la pandemia de Covid-19.
Aunque los servicios de tratamiento se vieron afectados, muchos países aplicaron medidas para garantizar que las personas no sufrieran interrupciones en el tratamiento, incluidas prescripciones más prolongadas. Sin embargo, muchos países no pudieron evaluar el impacto de la pandemia de Covid-19 en los servicios de profilaxis previa a la exposición (PrEP).
Además, el informe muestra que las poblaciones clave, como las trabajadoras sexuales, se vieron afectadas de manera desproporcionada por la pandemia y se enfrentaron a una mayor vulnerabilidad debido a un aumento de las conductas de riesgo y un acceso reducido a los servicios esenciales.
