MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
La cirugía de presbicia o vista cansada permite corregir el enfoque del ojo y se trata de una técnica poco invasiva que soluciona otros problemas de vista como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo, según la doctora Teresa Sánchez-Minguet, responsable de la Unidad de Oftalmología del Hospital Vithas Virgen del Consuelo.
La presbicia o vista cansada es una de las anomalías más comunes entre personas mayores, ya que suele dar sus primeros síntomas entre los 38 y los 45 años, como señala la Sociedad Española de Oftalmología.
"Se trata de una patología refractiva que se produce cuando el cristalino -la lente natural del ojo- pierde parte de su capacidad de enfoque debido al paso del tiempo", ha explicado Sánchez-Minguet.
Desde el centro médico destacan que se puede corregir mediante una intervención quirúrgica que "permite al paciente recuperar una buena visión sin distorsión y una independencia de las gafas".
En palabras de la doctora, "es una intervención indolora, rápida y muy poco invasiva. Los importantes avances que se han logrado en los últimos años, especialmente en el campo de la presbicia y de la catarata, permiten abordar estas intervenciones de forma individualizada, siendo además la recuperación muy rápida y el paciente puede hacer vida normal al día siguiente de la operación".
Tal y como afirma la doctora, la implantación de las lentes intraoculares multifocales es actualmente la técnica "más empleada y más definitiva" en la corrección de la presbicia, y la elección del tipo de lente intraocular a implantar se realiza de manera individualizada para cada paciente.
"Es una técnica quirúrgica segura, eficaz y definitiva en la solución de la vista cansada, -subraya la especialista- que consiste en sustituir el cristalino por una lente intraocular artificial, la cual es capaz realizar sus mismas funciones de enfoque, sea cual sea la distancia".
Una ventaja añadida de la cirugía de presbicia es su capacidad para corregir otros problemas de vista como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo. "Esta intervención también los corrige simultáneamente y además se elimina el riesgo de padecer cataratas, en definitiva, es recuperar muchas de las prestaciones visuales propias del cristalino joven", ha añadido la doctora.