Practicar tenis de mesa o natación ayuda a los pacientes con daño cerebral en las funciones motoras

Piscina UCLM
EUROPA PRESS/UCLM
Actualizado: lunes, 11 julio 2011 12:16

MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -

Practicar ciertos deportes, como el tenis de mesa o la natación, mejoran la función motora de pacientes con daño cerebral adquirido, causado por accidentes cerebrovasculares o traumatismos craneoencefálicos según el Hospital vasco Aita Menni, perteneciente al Instituto Foral de Asistencia Social (IFAS),el doctor Jorge Olmo.

Estos enfermos son personas que estando previamente sanas sufren una lesión cerebral en algún momento de su vida lo que da lugar a un menoscabo de su salud y calidad de vida. Las causas más frecuentes de daño cerebral son los ictus y los traumatismos craneoencefálicos. Sus secuelas son múltiples y dependen de la gravedad y de la zona afectada. Las secuelas imposibilita la realización actividades básica de la vida diaria en un 60 por cieto de los casos.

La rehabilitación suele ser larga, por ello la práctica de un deporte motiva mucho a las personas con daño cerebral, ya que les divierte, a la vez que les ayuda. Los beneficios terapéuticos que aporta el deporte adaptado son muchos, destacando el perfeccionamiento de diferentes aspectos a nivel motor, el equilibrio, la coordinacion o la resistencia a la fatiga.

El deporte adaptado perfecciona el esquema motor, el equilibrio, la coordinación, la resistencia a la fatiga, la velocidad y la fuerza, repercutiendo positivamente en la autonomía y funcionalidad. "Si una persona mejora la velocidad y el equilibrio, acabará mejorando la marcha y el tipo de actividades que puedan desarrollar en la vida diaria2, explican.

Algunos especialistas de Aita Menni ponen como ejemplo que "la natación hace que integren las cuatro extremidades en la práctica del deporte" y explican que, "muchos con dificultades para andar por deformidades en los pies, al nadar, desarrollan y mejoran partes del cuerpo que hasta entonces no usaban".

Sobre los beneficios del deporte, Olmo subraya que los pacientes, al practicar ciclismo, "cogen el manillar con las dos manos, consiguiendo mayor estimulación neuromuscular". "Un claro ejemplo de mejora en la autonomía es cuando se disponen a cruzar un paso de cebra de cuatro carriles, ya que muchos no cruzan solos por miedo a que no les de tiempo y se ponga el semáforo en rojo. El deporte adaptado les estimula para hacer esfuerzos extras y por consiguiente ganar, por ejemplo, la velocidad suficiente para atreverse a cruzar la vía", asegura.

Para Olmo es importante adaptar los retos a la capacidad de la persona, "si las personas afectadas ven que pueden seguir y tirar para adelante se animan y siguen haciéndolo. De lo contrario, si les pones algo muy complicado y ven, por ejemplo, que la pelota de tenis está siempre en el suelo se van a cansar".

El deporte tiene que estar adaptado a las características físicas de los afectados para que puedan desempeñarlo sin ningún problema. En esta línea, Olmo explica que, "a la hora de practicar deporte es muy importante hacer grupos homogéneos y adaptar muy bien el deporte y sus necesidades así evitas frustraciones". Por ello en el caso del tenis de mesa, se utilizan palas mas grandes y raquetas mas lentas para facilitar el juego.