Pasear por el campo incluso con frío o ver fotos de paisajes mejora la memoria y la concentración, según un estudio

Actualizado: martes, 16 diciembre 2008 19:52

Descubren que interactuar con la naturaleza puede tener "efectos similares a la meditación"

MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -

Una investigación desarrollada por científicos de la Facultad de Psicología de la Universidad de Michigan y publicada en el último número de 'Psychological Science' ha demostrado que caminar por un parque, tanto con calor como con frío, o incluso ver fotografías de la naturaleza puede ayudar a mejorar la memoria y la atención.

Los investigadores de la UM Marc Berman, John Jonides y Stephen Kaplan descubrieron que la memoria y la atención mejoran "en un 20 por ciento" después de una hora de interacción con la naturaleza, simplemente dando un paseo en un parque. A su juicio, este descubrimiento puede ayudar a personas que padecen de fatiga mental.

Asimismo, el trabajo ha demostrado que interactuar con la naturaleza disminuye el tiempo de recuperación de pacientes de cáncer, mejora la memoria y también la atención.

Según Berman, interactuar con la naturaleza puede tener "efectos similares a la meditación". "Encontramos los mismos beneficios (en estos paseos) en días soleados de verano que en fríos días de enero. La única diferencia fue que los participantes disfrutaron más las caminatas de primavera y verano que en invierno", apuntó.

LA CIUDAD CONSUME ATENCIÓN Y MEMORIA

Las distracciones y el bullicio de las calles de la ciudad, con personas cruzando las calles, estimula a la gente, pero parece que consumen atención y memoria. Sin embargo, la naturaleza tiene un efecto calmante y regenerativo en las personas, según este trabajo.

Berman desarrolló la teoría de que, si las personas interactúan con la naturaleza, les permite el descanso y les ayuda en sus procesos cognitivos. Así, decidió poner a prueba su teoría enviando a los participantes del estudio a caminatas alrededor de la ciudad universitaria, sobre rutas urbanas y también por jardines y parques.

Cuando los participantes caminaron por el parque, mejoraron su memoria a corto plazo en un 20 por ciento, pero no mostraron mejoras cuando caminaron por una zona urbana.

Los investigadores también probaron la teoría mostrando imágenes urbanas y de naturaleza. De nuevo constataron que, cuando se mira fotografías de la naturaleza, la memoria y la atención mejoran en un 20 por ciento, pero no al mirar imágenes de las zonas urbanas.