MADRID 16 May. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo sistema integral de guiado por imagen en cirugía refractiva de cataratas, llamado quirófano inteligente, permite una mayor precisión y eficacia, según han destacado diferentes participantes en la XIII Edición de Perlas Faco-Refractivas que forma parte del 29 Congreso de la Sociedad Española de Cirugía Ocular Implanto Refractiva (SECOIR), celebrado en Alicante.
El sistema une el láser de femtosegundos con el implante guiado por imagen de las lentes intraoculares, aumentando la seguridad, según ha explicado Laureano Álvarez-Rementería, director de la Clínica Rementería, pionera en su utilización, que ha realizado una intervención con esta plataforma retransmitida en directo para los asistentes al congreso.
"La técnica del láser de femtosegundos lleva utilizándose desde hace tres años en España y consiste en escanear el cristalino en su superficie y en su interior y, a través de ondas infrarrojas, y en millonésimas de segundo, crea una burbuja de aire que separa las moléculas del cristalino sin cortar ni quemar ningún tejido. De este modo, no daña ninguna célula adyacente. Con el procedimiento convencional todos los pasos son manuales por lo que los resultados pueden variar", ha explicado.
El procedimiento consiste en tomar una imagen del ojo del paciente, que se utiliza como referencia en quirófano en función de los vasos sanguíneos, la pupila y otras partes anatómicas del ojo. En función de la misma y de los datos biométricos se planifican las incisiones y se calcula la potencia y orientación de la lente intraocular a implantar durante la cirugía.
Una vez en quirófano, "el sistema muestra al cirujano la posición de las incisiones realizadas por el láser de femtosegundos en la fase previa o donde debe realizar las incisiones según la planificación pre-operatoria", comenta este especialista.
Así, el quirófano inteligente "muestra una guía visual que permite comprobar el correcto centrado y la orientación exacta de la lente intraocular, lo que permite los mejores resultados".
En ella existe una total comunicación entre todos los equipos involucrados en la cirugía de cataratas (topógrafo corneal, microscopio quirúrgico y láser y emisor de ultrasonidos) a partir de una fotografía del ojo en alta resolución, que permite colocar la lente intraocular con total precisión.
Además, la colocación de la lente intraocular se realiza con mayor exactitud en el sitio preciso, con lo que "se evita el tener que repetir la intervención", añade este oftalmólogo, al tiempo que el resultado también es más predecible y hace que ya no dependa tanto de la pericia del cirujano. "Además es más rápido y la recuperación más breve", ha apuntado.
La operación de cataratas es la más frecuente en oftalmología, debido a que es una consecuencia del envejecimiento del ojo y de la opacidad progresiva del cristalino que afecta a la mitad de los mayores de 65 años. La única manera de eliminarla es extraer el cristalino opaco y sustituirlo por una lente intraocular.