Una nueva vacuna provoca inmunidad en los pulmones protegiéndolos de la tuberculosis

Mycobacterium tuberculosis
Mycobacterium tuberculosis - FLICKR/NIAID - Archivo
Publicado: martes, 27 agosto 2019 13:37


MADRID, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de investigadores del Centenary Institute y la Universidad de Sidney, ambos en Australia, ha desarrollado una vacuna dirigida al tratamiento de la tuberculosis (TB) que provoca inmunidad en los pulmones, lo que supone una nueva técnica para el abordaje de esta enfermedad, para la que actualmente solo existe una vacuna que reduce el riesgo de contraer la enfermedad en lactantes.

Esta patología es causada por la bacteria 'Mycobacterium tuberculosis' que infecta los pulmones tras su inhalación. Es muy contagiosa y se estima que causa hasta 1,6 millones de muertes anuales en todo el mundo. Actualmente se considera que existen dos mil millones de personas portadoras de tuberculosis.

En este sentido, el estudio, publicado en 'Journal of Medicinal Chemistry', ha conseguido demostrar que existe una vacuna que ofrece protección contra la esta enfermedad.

La eficacia de esta vacuna ha sido probada en modelos de ratón. Para su creación, el equipo sintetizó dos péptidos que se encuentran en las bacterias que causan la tuberculosis. Estas fueron unidas a un estimulante, que fue capaz de iniciar una respuesta inmune en los pulmones de los animales. Cuando esta vacuna llegaba a los pulmones se producía una estimulación en las células T, las encargadas de proteger al organismo contra esta enfermedad, lo que desarrollaba una inmunización de los pulmones.

Actualmente, solo existe una vacuna para la tuberculosis, conocida como BCG, pero esta solo es eficaz para reducir el riesgo de contagio en los lactantes, según ha explicado Warwick Britton, director del Programa de Investigación de la Tuberculosis del Centenary Institute, quien ha puesto de relieve que no proporciona protección a largo plazo, por lo que "se necesitan urgentemente vacunas más eficaces para salvar vidas".

Así, ha destacado que una buena opción sería desarrollar esta vacuna en forma de aerosol nasal, ya que "su inhalación sería fácil y protegería correctamente de la tuberculosis de por vida". Por último, ha concluido que el siguiente paso es determinar si esta técnica puede desarrollarse de forma adecuada y efectiva para su aplicación en humanos.