MADRID 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
La tomografía de coherencia óptica (OCT, por sus siglas en inglés), una herramienta que se utiliza habitualmente para diagnosticar y planificar el tratamiento de enfermedades oculares, se ha modificado para obtener imágenes del oído interno, lo que podría mejorar el diagnóstico y el tratamiento de la pérdida auditiva según investigadores de la Facultad de Medicina Keck de la USC (Estados Unidos).
En un estudio de prueba de concepto, los investigadores descubrieron que la OCT puede medir los niveles de líquido en el oído interno, lo cual se correlaciona con el grado de pérdida auditiva del paciente. Los hallazgos se publican en 'Science Translational Medicine'.
"Estos hallazgos son emocionantes porque la pérdida auditiva puede ocurrir de forma repentina y, a menudo, desconocemos la causa. La OCT ofrece una manera de explorar la causa subyacente y, potencialmente, orientar el tratamiento", aporta el autor principal, el doctor John Oghalai, profesor y director del Departamento de Otorrinolaringología de la Facultad de Medicina Keck.
La pérdida repentina de audición, a veces acompañada de vértigo, se produce en la enfermedad de Ménière, la hidropesía coclear y otras afecciones auditivas. Una característica distintiva de estas enfermedades es el desequilibrio de fluidos en el oído interno, pero medir el equilibrio hídrico es un desafío. La mejor tecnología disponible, la resonancia magnética (RM), carece de la resolución necesaria para diagnosticar o guiar el tratamiento de forma fiable.
La OCT ofrece una forma más rápida, precisa y económica de ver los fluidos del oído interno, las células ciliadas y otras estructuras relevantes para diagnosticar y tratar la pérdida auditiva. En concreto, los investigadores probaron la nueva herramienta en 19 pacientes sometidos a cirugía de oído por diversas afecciones.
La OCT utiliza ondas de luz para escanear el tejido y crear imágenes en 3D, de forma similar a la forma en que el ultrasonido produce imágenes utilizando ondas sonoras.
De esta forma, descubrieron que la OCT podía detectar de forma fiable el desequilibrio de fluidos en el oído interno, lo cual se correlacionaba con la gravedad de la pérdida auditiva del paciente. Aunque la herramienta está actualmente limitada al uso durante la cirugía, los investigadores están trabajando para adaptarla para su aplicación en la clínica.
Los últimos hallazgos se basan en trabajos previos del equipo, donde utilizaron la OCT para obtener imágenes de la cóclea en animales despiertos por primera vez.
"Con mejoras, la herramienta podría ayudar a los médicos a identificar más rápidamente la causa de la pérdida auditiva, determinar cómo tratarla e incluso apoyar los esfuerzos para desarrollar nuevas terapias para restaurar la audición, insiste Oghalai.
La OCT utiliza ondas de luz para escanear el tejido y crear imágenes en 3D, de forma similar a la forma en que el ultrasonido produce imágenes utilizando ondas sonoras.
El equipo de la Facultad de Medicina Keck utilizó la herramienta para escanear los oídos internos de 19 pacientes sometidos a cirugía de oído. Seis pacientes presentaban una función auditiva interna normal, cuatro padecían la enfermedad de Ménière y nueve presentaban un schwannoma vestibular (un tumor benigno en el nervio que conecta el oído interno con el cerebro).
Durante la cirugía, se extirpó temporalmente un hueso externo grueso, conocido como mastoides, lo que permitió a los investigadores usar la OCT para obtener imágenes de los compartimentos de fluidos del oído interno.
Por otra parte, la OCT puede ayudar a los cirujanos, por ejemplo, a evitar daños en las delicadas estructuras del oído y a distinguir los tumores cerebrales del tejido sano. Para ello, los investigadores están trabajando en el desarrollo de una versión más pequeña y asequible de la herramienta, que planean distribuir y probar con cirujanos.
Además, la OCT podría ofrecer importantes ventajas sobre la RM porque es más económica, más rápida y puede realizarse consecutivamente para evaluar la eficacia del tratamiento. Por ejemplo, un profesional podría tomar una imagen, administrar un tratamiento farmacológico para un desequilibrio hídrico y luego tomar otra imagen 30 minutos después.
Si la OCT puede utilizarse fuera del quirófano, también podría contribuir al desarrollo de nuevos tratamientos para la pérdida auditiva. Varias terapias génicas, cuyo objetivo es regenerar las células ciliadas perdidas en el oído interno, se encuentran actualmente en ensayos clínicos.
Por último, la OCT puede proporcionar una forma rápida y precisa de comprobar la eficacia de dichas terapias mediante la obtención de imágenes de las células ciliadas a medida que crecen.