MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un estudio en el que ha participado el Instituto Catalán de Oncología (ICO) demuestra la utilidad de la infiltración de linfocitos T (TCR) como biomarcador de pronóstico en pacientes con cáncer colorrectal en estadio II con riesgo de recaída.
La importancia del estudio reside en que, actualmente, aproximadamente el 20 por ciento de los pacientes diagnosticados en estadio II experimentan recaídas después de que se les haya realizado la cirugía, y todavía no existe ningún marcador que los identifique.
Hasta hoy, se sabía que la infiltración de las células T (un tipo de linfocito que forma parte del sistema inmunitario adaptativo) tiene un papel importante en la supervivencia de los pacientes con cáncer colorrectal. Así pues, utilizando la nueva técnica llamada 'inmuno secuenciación de los TCR', en muestras de más de 600 pacientes con cáncer colorrectal, los investigadores han querido comprobar la utilidad de este nuevo biomarcador. Esta nueva técnica mide tanto la cantidad de linfocitos T infiltrantes como su clonalidad, que es la diversidad de linfocitos que reconocen
dianas diferentes.
Utilizando esta nueva técnica de inmuno secuenciación del TCR se han secuenciado un total de 640 tumores de cáncer colorrectal de cuatro estudios diferentes, tres de pacientes del ICO Hospitalet y uno de Israel.
Así, a través de este nuevo método, a diferencia de los anteriores, mediante la secuenciación de las regiones TCR (receptor de linfocitos que reconocen antígenos tumorales) se ha obtenido tanto la abundancia de la célula T que infiltra el tumor como el índice de clonalidad de las mismas.
Los resultados obtenidos han demostrado que la combinación de ambas variables, esto es, cantidad y clonalidad, se asocian claramente al pronóstico. En este sentido, las muestras con más cantidad de TCR y más diversidad de clones son las que presentan un mejor pronóstico de la enfermedad.
Según el jefe del Programa de Análisis de Datos Oncológicas (PADO) del ICO-IDIBELL, Víctor Moreno, "los resultados de este estudio demuestran que a niveles más altos de TCR, y una mayor diversidad de repertorio TCR, se asocia a un mejor pronóstico en este grupo específico de pacientes donde aún no existen marcadores claros de recurrencia".
En concreto, este estudio ha sido una colaboración liderada por el responsable del Programa de Análisis de Datos Oncológicas (PADO) del Instituto Catalán de Oncología (ICO), Víctor Moreno; el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL), el CIBERESP y Universidad de Barcelona, y su equipo. En el proyecto han participado el grupo de investigación liderado por Steven Gruber, del 'City of Hope National Medical Center' de Los Ángeles (Estados Unidos); el CEO de la empresa Adaptive Biotechnologies, Harlan Robins (Estados Unidos); y Gad Rennert, del Carmel Medical Center and Technion de Haifa (Israel).