Incontinencia urinaria
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Actualizado: martes, 12 septiembre 2017 13:53

MADRID, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -

Actualmente uno de cada tres pacientes con incontinencia urinaria está "infradiagnosticado e infratratado", no identificar estos casos "puede impactar significativamente en los costes sanitarios y los costes intangibles", según ha declarado el jefe de Servicio de Urología del Hospital Universitario Virgen de las Nieves (Granada), presidente de la Asociación Española de Urología (AEU), José Manuel Cózar.

En este sentido, el experto ha explicado, durante la presentación del 'Libro Blanco de la Carga Socioeconómica de la Incontinencia Urinaria' realizado por Astellas Pharma y el Instituto Max Weber, que el hecho de no descubrir ni tratar a los pacientes con incontinencia supone que alrededor del 74,8 por ciento utilice pañales y productos absorbentes, lo que supone el mayor gasto sanitario.

Asimismo, Cózar considera necesario "conocer la magnitud del impacto socioeconómico de estas afecciones" que se recogen en el libro, "porque permitiría darles su justa importancia frente a otras enfermedades crónicas más visibles y consideradas prioritarias actualmente".

La incontinencia es un problema que afecta 5 por de la población española y, en el caso de las mujeres adultas, a más del 10 por ciento, posicionándose de este modo como la tercera enfermedad crónica que afecta a la calidad de vida de los españoles.

RECOMENDACIONES

Los expertos del 'Libro Blanco' ponen de manifiesto la necesidad de detectar la incontinencia y de la vejiga hiperactiva, la importancia de la gestión por procesos y la trascendencia del enfoque centrado en la persona, dando especial importancia a la continuidad asistencial entre la atención primaria y especializada.

También consideran necesario el establecimiento de criterios clínicos y organizativos en el manejo de estas dos patologías que favorezcan la atención integrada y el establecimiento de medidas para mejorar la adherencia.

De igual modo, se proponen fomentar el trabajo colaborativo médico-paciente, facilitar la administración del tratamiento con una posología más sencilla y elaborar un plan integral de atención a la vejiga hiperactiva.

Por último, recomiendan disminuir el uso de recursos sanitarios y el incremento en la calidad de vida de los pacientes de ambas enfermedades, que no suponen un peligro para la vida, pero que la deterioran significativamente.

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