MADRID, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -
La neuromodulación se posiciona como una posible alternativa terapéutica para mejorar la falta de adherencia en el tratamiento de la depresión, uno de los motivos más frecuentes de la ineficacia de la terapia, según el psiquiatra de la unidad de Neuromodulación del Hospital Vithas Nuestra Señora de América, Gabriel Rubio.
La neuromodulación es un procedimiento que permite modificar la actividad del sistema nervioso para mejorar la calidad de vida y la función del organismo humano. En el tratamiento de la depresión se emplea la estimulación magnética transcraneal repetitiva, "porque es una técnica eficaz, indolora y no invasiva, que consiste en la aplicación de estímulos magnéticos en determinadas áreas de la superficie del cerebro, con el objetivo de restaurar las anomalías de funcionamiento implicadas en la enfermedad", ha explicado el especialista.
El abandono del tratamiento por parte de los pacientes depresivos en España oscila entre un 39, 7 y un 52,7 por ciento, según los datos expuestos en el último Congreso Nacional de Psiquiatría. En este sentido, un 40 por ciento lo abandona el primer mes, sobre todo por los efectos secundarios como las disfunciones sexuales, que afectan aproximadamente al 70 por ciento de los pacientes tratados con un inhibidor selectivo de la recaptación de la serotonina.
Esta terapia cuenta con ventajas como una corta duración de 20 sesiones consecutivas y una baja incidencia de efectos secundarios, siendo el más frecuente el dolor de cabeza que puede tratarse con analgésicos habituales. La neuromodulación es recomendable para la depresión resistente, en caso de pacientes que hayan abandonado los tratamientos farmacológicos por los efectos secundarios.