Sin embargo, no propondrán que estas medidas se apliquen en España ni tampoco la prohibición total de la venta de tabaco porque "primero hay que informar y concienciar"
MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
Prohibir fumar a la entrada de los edificios u obligar a las tabacaleras a vender su producto en cajetillas 'neutras', sin marcas o dibujos atractivos, podrían ser medidas "eficaces" para luchar contra el tabaquismo, como lo demuestran diversos estudios realizados en países como Estados Unidos, Canadá o Brasil, según el coordinador del Área de Tabaquismo de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), el doctor Carlos Jiménez.
En declaraciones a Europa Press, este experto en tabaquismo dijo que "está demostrado" que el humo de tabaco que se produce a la entrada de los edificios puede entrar en los mismos y perjudicar a las personas que están dentro debido "a que el humo ambiente posee microsustancias que se dispersan bien y hacen fácil su paso de un lugar a otro".
Además, apuntó que diversos estudios científicos desarrollados Canadá y Brasil han demostrado que restar atractivo a las cajetillas, con avisos sanitarios o imágenes de enfermedades --una medida que se pondrá en marcha en España--, "logra disminuir el número de fumadores y hacer que menos jóvenes se animen a iniciarse en este hábito".
Sin embargo, España no estaría preparada aún para aceptar estas medidas, que estudia el gobierno de Reino Unido con el objetivo de reducir a la mitad su número de fumadores para 2020, ni tampoco para la prohibición total del tabaco ya que, a su juicio, "se trata de un país donde se fuma desde hace cinco siglos y no se puede prohibir fumar de un momento a otro sin concienciar antes a los fumadores sobre sus riesgos y ofrecerles ayuda".
SEPAR apuesta porque la nueva normativa sobre el tabaco que prepara Sanidad "prohíba fumar en cualquier lugar público cerrado, subir los impuestos al tabaco para dedicar estos fondos a programas de deshabituación y controlar el patrocinio y la publicidad indirecta de este producto". Además, según el doctor Jiménez, son "partidarios de limitar el acceso al tabaco, sobre todo el de los más jóvenes, reduciendo el número de máquinas expendedoras".
UNAS 250 SUSTANCIAS NOCIVAS, 50 CANCERÍGENAS
La Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaquismo pasivo causa 600.000 muertes prematuras por año, por lo que 1 de cada 8 muertes en el mundo tendría su causa en la inhalación del humo ajeno. En España, esta cifra se estima entre las 2.500 y 3.000 personas, lo que representa más de 50 muertes semanales. Según destacó este especialista, "esta cifra es mucho más elevada que las muertes por accidente de tráfico semanales".
En esta linea, el doctor Jiménez recordó que, en el humo de tabaco, "existen más de 4.000 sustancias químicas, de las cuales ya está suficientemente probado que al menos 250 de ellas son nocivas para el organismo y más de 50 son cancerígenas". Como consecuencia de estas sustancias, el tabaquismo pasivo causa graves enfermedades cardiovasculares y respiratorias, como por ejemplo cardiopatías coronarias o cáncer de pulmón.
El Gobierno británico tiene el objetivo de reducir a la mitad el número de fumadores en este país para 2020, por lo que estudia ya diferentes medidas para lograrlo, entre ellas imponer las cajetillas 'neutras', prohibir las máquinas expendedoras o revisar la legislación para prohibir fumar en la entrada de los edificios o calles adyacentes.