MADRID, 19 Jul. (EDIZIONES) -
La música puede ofrecer una alternativa al medicamento que se utiliza habitualmente para calmar los nervios antes del uso de anestesia regional, sugieren los resultados de un ensayo clínico, publicado en línea en la revista 'Regional Anesthesia & Pain Medicine'.
Parece tener efectos similares a los del midazolam sedante para reducir la ansiedad antes de un bloqueo de nervio periférico, un tipo de procedimiento anestésico realizado bajo guía de ultrasonido y diseñado para adormecer una región específica del cuerpo.
La ansiedad preoperatoria es común y puede elevar los niveles de hormonas del estrés en el cuerpo, lo que a su vez puede afectar la recuperación después de la cirugía.
Por lo general, se trata con benzodiazepinas, como el midazolam. Pero estos medicamentos tienen efectos secundarios, como afectar la respiración, alterar el flujo sanguíneo y, paradójicamente, aumentar los niveles de agitación y hostilidad. El uso de estos medicamentos también requiere un control continuo por parte de personal cualificado.
La terapia musical se ha utilizado antes para reducir la ansiedad preoperatoria, pero no se había comparado directamente con el midazolam intravenoso. Los investigadores querían averiguar si podría ofrecer una alternativa adecuada al midazolam para calmar los nervios antes de llevar a cabo un bloqueo nervioso periférico (regional).
Investigadores de la Universidad de Pennsylvania, en Estados Unidos, asignaron al azar a 157 adultos para recibir 1-2 mg de midazolam, inyectados 3 minutos antes del uso de un bloqueo de nervio periférico, o para escuchar la serie de música Weightless de Marconi Union a través de auriculares con cancelación de ruido para el mismo período. Esta canción está considerada como una de las más relajantes del mundo.
Los niveles de ansiedad se calificaron utilizando una medida validada (Inventario de Ansiedad de Rasgo Estatal-6, o STAI-6 para abreviar) antes y después del uso de cada método para calmar la ansiedad. La satisfacción entre los pacientes y los médicos se calificó en una escala de 10 puntos, con 0 que refleja el nivel más bajo de satisfacción.
Los cambios en los niveles de ansiedad preoperatoria fueron similares en ambos grupos, aunque los pacientes en el grupo de música estaban menos satisfechos que los que recibieron midazolam, posiblemente porque los pacientes no podían elegir la música que escuchaban, sugieren los investigadores. Pero no hubo diferencia en los niveles de satisfacción entre los médicos.
Los pacientes y los médicos pensaron que era más difícil comunicarse cuando la música se usaba para calmar los nervios, posiblemente debido al uso de audífonos con cancelación de ruido, y no estandarizar el volumen de la música, sugieren los investigadores.
Aceptan que una comparación que dura solo 3 minutos puede haber sido demasiado breve, pero se eligió este período porque es el tiempo que tarda el midazolam en alcanzar su máxima eficacia. Y reconocen que la medida utilizada para evaluar la satisfacción no era una escala validada.
Sin embargo, sus hallazgos los llevan a concluir que la música puede ofrecerse como una alternativa al midazolam antes de llevar a cabo un bloqueo nervioso regional.
"Sin embargo, se necesitan más estudios para evaluar si el tipo de música, así como la forma en que se entrega, ofrece ventajas sobre el midazolam que superan el aumento de las barreras de comunicación", advierten los investigadores.