La multidisciplinariedad, un aspecto fundamental para tratar a los pacientes con VIH hoy en día

Archivo - Prueba para el autodiagnóstico del VIH
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Publicado: miércoles, 19 enero 2022 18:53


MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -

El doctor José Antonio Pérez Molina, especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Universitario Ramón y Cajal, ha destacado que el modelo de atención al paciente con VIH a día de hoy "es radicalmente diferente a hace años", ya que "es un modelo de atención a la enfermedad crónica donde el papel principal no es necesariamente de los infectólogos" y donde, por tanto, "la multidisciplinariedad es fundamental".

"Los pacientes necesitan a sus médicos, pero es básica la intervención de otros profesionales sanitarios e incluso no sanitarios, siendo fundamental la relación con los profesionales de Enfermería, con los psicólogos de apoyo y con la farmacia hospitalaria, entre otros", ha señalado el experto en el marco del primer encuentro del proyecto 'Cápsulas de Innovación CiViiV', impulsado por la compañía ViiV, especializada en esta enfermedad.

Este cambio de atención al paciente con VIH ha venido dado por un cambio en la presentación de la enfermedad, tal y como ha puesto de manifiesto el infectólogo. "Pasamos de una infección aguda, en la que la atención era sobre todo hospitalaria, centrada en fármacos, a un tipo de paciente con pronósticos vitales de entre 40 y 60 años desde el diagnóstico, lo que supone poca diferencia con las personas no infectadas".

Ahora, recuerda el experto, el paciente es "una persona con una enfermedad crónica". "Es la primera infección viral crónica y, como tal, nos ha hecho cambiar radicalmente la forma de atender a las personas", ha destacado. Así, esta atención multidisciplinar debe apoyarse en las nuevas tecnologías, haciendo uso, por ejemplo, de la historia clínica electrónica, donde aparezca actualizada toda la información del paciente en todos los aspectos.

Por todo ello, Pérez Molina ha apuntado que otro factor esencial de la enfermedad es el tiempo, "ya que los problemas de pacientes serán presentes y futuros". Así, ha recordado que, al principio de la epidemia, "se miraban los problemas con gafas, en el corto plazo, y hoy, en cambio, se hace con prismáticos porque, igual que otras enfermedades crónicas, como la diabetes o la hipertensión, son problemas que van a convivir con la persona durante décadas".

Por su parte, Joan Carles March, codirector de la Escuela de Paciente en Andalucía, se ha mostrado de acuerdo con Pérez Molina y ha puesto en valor el papel de las asociaciones, "fundamentales en el abordaje de la enfermedad, fomentando la formación y ayudando a cambiar y mejorar la atención".

PACIENTES ACTIVOS PARA AYUDAR A OTROS

Tal y como ha explicado, el trabajo entre iguales es "clave para ayudar a mejorar la atención sanitaria", por lo que ha defendido un modelo de "pacientes activos, empoderados y formados que deseen ayudar a otros".

En este sentido, ha resaltado la importancia que tiene para los pacientes conocer los elementos que le ayudan a tomar las mejores decisiones de cara a mejorar su calidad de vida. "De esta manera, disminuyen las visitas innecesarias a los médicos: un paciente activo reingresa mucho menos en el hospital y tiene una mejor atención y más coordinada", ha reiterado.

Además, ha puesto de relieve que la comunicación entre profesional sanitario y paciente es "mucho mejor" cuando este es "activo y formado". "Por último, el paciente activo tiene una mayor confianza en el sistema sanitario, mejor comunicación, coordinación, menos reingreso hospitalario y, además, menos errores médicos", ha concluido.

En este sentido, Diego García Morcillo, director de ADHARA Checkpoint, también ha señalado la importancia de contar con pacientes formados para hacer frente a la "infoxicación". "Los pacientes recibimos informaciones muy diversas y a veces contradictorias y a veces carecemos de las guías necesarias para saber cuál es la información relevante y cuál no".

Por ello, García Morillo ha puesto el foco en la farmacia hospitalaria como parte de la solución de este problema. "El farmacéutico hospitalario puede encauzar esa información para que el paciente tenga los conocimientos adecuados", ha señalado. Asimismo, también ha ensalzado el papel de este profesional para "hacer frente, mediante la dispensación, a la fatiga que despierta "la cronicidad de la medicación".

De esa forma, durante el evento se ha puesto de manifiesto la realidad diferente y las necesidades cambiantes de las personas con VIH y la importancia del modelo de atención cada vez más individualizado para, así, contribuir a la mejora de la calidad de vida. Un aspecto que pasa, necesariamente, por garantizar una escucha y participación cada vez mayor, tal y como han puesto de manifiesto los expertos.