MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
La mortalidad global por traumatismo grave ha aumentado hasta un 15 por ciento, debido sobre todo al aumento en el número de pacientes ancianos con gran comorbilidad y fragilidad ingresados las UCI por traumatismo craneoencefálico como principal razón, según datos del Registro de Trauma en UCI (RETRAUCI).
Los especialistas hablan de enfermedad traumática grave cuando una persona ha sufrido una importante lesión de causa traumática que potencialmente pone en riesgo su vida o le dejará lesiones o discapacidades de consideración.
Casi un 40 por ciento de estas personas precisan alguna intervención en las primeras 24 horas y casi un 70 por ciento ventilación mecánica durante su estancia en UCI.
Así, según los datos de RETRAUCI, la edad media de los pacientes traumáticos ingresados en las UCI españolas es de 47 años, la mayoría de ellos varones. Las principales causas son las caídas y las precipitaciones, que han igualado a los accidentes de tráfico como razón principal del traumatismo. Existe también un porcentaje relevante de accidentes laborales, así como violencia interpersonal (armas de fuego, armas blancas) o incluso eventos catastróficos o sucesos (ya tengan origen natural o humano) que implican a un gran número de personas.
La evolución del paciente que presenta un traumatismo depende fundamentalmente de la gravedad y energía del trauma, de la reserva fisiológica del paciente y de la calidad y precocidad de los cuidados administrados, siendo estos últimos los factores modificables. Tanto por la gravedad y energía del traumatismo, por ejemplo, en los
accidentes de tráfico) como por la escasa reserva fisiológica, en el caso de los ancianos, los pacientes con un traumatismo grave pueden ingresar en las UCI y así beneficiarse del tratamiento precoz e intensivo.
El manejo del paciente con traumatismo grave debe ser multidisciplinar. La suma de los conocimientos de las diferentes especialidades implicadas y su atención en centros especializados en trauma grave tiene un impacto positivo en el resultado final de los pacientes. Es por ello que la Asociación Española de Cirujanos (AEC) y la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC), ponen en marcha las 'Jornadas multidisciplinarias de enfermedad traumática grave', con el fin de compartir conocimientos y avanzar hacia una mejor atención del paciente traumatizado crítico.
El presidente de la AEC, el doctor Eduardo García-Granero, comenta que "el paciente politraumatizado y su tratamiento constituyen una de las áreas donde mayor importancia cobra la atención médica multidisciplinar. Estas jornadas organizadas por la SEMICYUC en colaboración con la AEC, son el resultado del convenio firmado en
2018. Aportan un gran valor en el sentido de coordinar esta asistencia al paciente traumático grave y reducir su morbi-mortalidad. La coordinación entre los cuidados intensivos y los cuidados quirúrgicos es esencial para mejorar los resultados y salvar vidas".
Por su parte, el director de las jornadas por parte de la SEMICYUC, Juan Antonio Llompart Pou, afirma que "la atención al trauma puede considerarse un trabajo de equipo. En este enfoque multidisciplinar, el papel fundamental de los cirujanos de trauma y emergencias se encuentra en el abordaje del paciente con shock hemorrágico, que constituye la principal causa de mortalidad evitable. En estos pacientes, tras una rápida exploración inicial, debe priorizarse el tratamiento del control de sangrado y en muchas ocasiones será necesario un procedimiento quirúrgico de control de daños emergente. Contamos con la suerte de tener con algunos de los mayores expertos nacionales en el manejo de estos pacientes y esperamos que puedan ser muy provechosas para los asistentes".