MADRID 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
La bioimpedancia es capaz de monitorizar cambios en la hidratación de pacientes sometidos a diálisis y anticipar futuras complicaciones, así como identificar individuos con retención de líquidos y dificultades respiratorias o con exceso de hidratación asociado a una insuficiencia cardíaca aguda, según ha informado Henry C. Lukaski, investigador del Departamento de Kinesiología y Educación de Salud Pública de la Universidad de Dakota del Norte durante el 'X Simposio Internacional sobre composición corporal', celebrado en Cascias (Portugal).
El método de bioimpedancia evalúa el porcentaje de grasa, materia magra e hidratación en el cuerpo humano y "permite calcular la franja ideal de peso para el individuo según su sexo y edad", ha explicado el experto.
Lukaski también ha apuntado que "otros usos positivos de la bioimpedancia pueden conducir a una identificación adecuada de las alteraciones en la hidratación entre las poblaciones más vulnerables. A través de este método es posible identificar individuos que tienen una hidratación inadecuada y que pueden estar en riesgo en términos de función mental o sufrir complicaciones con determinadas dosis de medicamento".
El encuentro, organizado por la Facultad de Motricidad Humana (FMH) de la Universidad de Lisboa, ha contado también con la intervención del profesor de la Universidad de Wisconsin Dale Schoeller, que presentó los resultados de su investigación sobre la adecuación de la ecuación del balance energético.
Según el ponente, "determinar la relación entre el peso corporal y la cantidad de alimentos que consumimos es fundamental para comprender el exceso de aumento de peso a medida que envejecemos, así como las pérdidas durante el tratamiento de la obesidad. Esta relación es complicada, porque nuestro cuerpo se divide en dos componentes principales: masa libre de grasa, compuesta por agua, proteína y algunos componentes menores, y masa grasa, que es íntegramente grasa".
Asimismo, Schoeller ha señalado que "el agua es el nutriente más importante para la vida y constituye casi de la mitad a dos tercios del peso del cuerpo. Realizar la medición de los cambios corporales no es fácil". "Aún es reciente el desarrollo de métodos para medir el agua del cuerpo y sus dos principales componentes intra y extracelulares que permiten sus mediciones en situaciones clínicas generales", ha agregado.
Por último, ha destacado que un mejor conocimiento de la cantidad de energía que hay en un kilogramo de masa libre de grasa "permite estimar mejor las cantidades relativas de masa libre de grasa y la grasa que debe perderse en períodos de dieta".