MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
Visión y Vida, apoyada por la Dirección General de Tráfico, y la asociación de víctimas de accidentes de tráfico DIA y Fundtrafic, ha lanzado una campaña para realizar revisiones visuales grautitas a todos los conductores antes del inicio de las vacaciones, con el objetivo de colaborar en la reducción de las tasas de siniestralidad en carretera.
"Todos somos conscientes de la laxitud de las pruebas a las que nos someten para autorizarnos en la renovación de nuestro permiso de conducción. Por ello, desde Visión y Vida queremos apelar a la responsabilidad de cada conductor y darles la oportunidad de someterse sin coste a un examen exhaustivo que les indicará cómo se encuentra su visión para permitirles conducir con seguridad", ha explicado el presidente de Visión y Vida, Salvador Alsina.
De este modo, más de 1.000 ópticas tienen abierto su gabinete a la ciudadanía hasta el día 31 de julio de 2018. El examen visual que se ha creado para esta campaña ha sido elaborado por los decanos y coordinadores de todas las facultades de óptica y optometría que hay en España, teniendo en cuenta la legislación actual vigente en materia de aptitudes psicofísicas para la conducción y analizando todos los aspectos visuales que inciden de manera directa en la conducción y que no se suelen revisar, como son la estereopsis, el campo visual, la sensibilidad al contraste o la presión intraocular, además de comprobar si existe alguna patología latente que pueda estar afectando a la capacidad visual del usuario.
Asimismo, acorde con el estudio de Visión y Vida presentado el año pasado, las personas con peor visión tienen tres veces más accidentes que el resto de conductores. Esto se asocia a que el 90 por ciento de la información que recibimos para la toma de decisiones al volante proviene de los ojos. Por ello, la visión está ya incluida como uno de los once elementos clave para una conducción segura en el manual de la FIA y el RACE, han recordado desde la entidad.
Actualmente conducen en nuestras carreteras 7 millones de personas que tienen, como mínimo, un problema visual que afecta a su conducción. De ellos, uno de cada cuatro se pone al volante con una visión binocular inferior que la exigida por ley y, además, 700.000 conductores no deberían conducir debido a su mala visión.
"Nuestro trabajo se basa en, además de dar apoyo a las víctimas de un accidente, en dar la información necesaria para prevenir futuros accidentes. Sabemos que la visión es clave en la conducción, aunque hasta la fecha nunca se ha realizado ninguna iniciativa en este sentido, por ello queremos liderar junto con Visión y Vida este cambio y explicar a los ciudadanos que en carretera, su visión es su vida y la de los suyos, tal y como reza el eslogan", ha concluido el presidente de Asociación DIA de Víctimas de Accidentes y de Fundtrafic, Francisco Canes.