MADRID, 21 Feb. (De la enviada de EUROPA PRESS a Bangkok, Cristina Velázquez) -
El doctor del departamento de Gastroenterología, Hepatitis y Endocrinología del Hanover Medical Shool, en Alemania, el profesor Heiner Wedemeyer, ha explicado que, "aunque el 95 por ciento de los pacientes se curan de la hepatitis B gracias al avance de los tratamiento actuales en los últimos 15 años, es necesario mejorar su la calidad de vida a través de nuevos tratamientos".
Así, lo ha señalado en el marco de la 21 Conferencia Anual de la Asociación Asia-Pacífico para el Estudio del Hígado (APASL, por sus siglas en inglés), que se celebra durante esta semana en Bangokok (Tailandia), donde ha presentado estudios de nuevos tratamientos para la hepatitis C y cáncer hepático, aparte de los resultados de un nuevo ensayo de entecavir, comercializado como 'Baraclude', para hepatitis B.
Durante su intervención, Wedemeyer ha recordado que entre las barreras que estos pacientes se encuentran son tratamientos que a largo tiempo no son efectivos; que, además, no todas las formulaciones son igual de efectivas, por lo que "hay que elegir la droga correcta" y, por último, que los médicos tienen que enfrentar a la falta de infoemación, ya que desde el 2008/2009 no ha habido una revisión de las Guías Médicas. Precisamente, ha explicado, de este congreso esperan que salgan nuevas líneas de tratamientos y una actualización de la actual guía.
No obstante, señala, que "no todos los pacientes son iguales, los pacientes europeos son diferentes de los asiáticos", por este motivo a la hora de desarrollar estudios hay que tener en cuenta diferentes condicionantes, además de las características del virus y los diferentes fármacos, deben ser observadas las características del paciente y las posibles comorbilidades.
Por ejemplo, los pacientes con HbeAg- positivo el virus se replia con rapidez, mientras que en los HbeAg-negativo el virus ha mutado, asimismo en los pacientes con hepatitis crónica compensada el hígado a pesar de estar dañado sigue realizando funciones esenciales, y, finalmente, si tienen descompensación hepatíca el órgano está muy deteriorado y no funciona adecuadamente.
Así, cobra más importancia el estudio presentado en APLAS que demuestra la efectividad y seguridad de entercavir a las 48 semanas de tratamiento en pacientes asiáticos. El estudio, presentado por el director del departamento de la Unidad de enfermedades infecciosas y Hepatología del Nanfang Hospital en la región china de Guangazhou, Jin-Lin Huo, examinó la eficacia y la seguridad, un primer estudio evaluó sus efectos en 2.667 pacientes con hepatitis B crónica, tanto naïve como en los que sí habían recibido tratamiento previo.
Los resultados demostraron que, a las 48 semanas de tratamiento con entecavi, un 69 por ciento de los naïve con enfermedad hepatica compensada logró una respuesta virológica; mientras que el 53 por ciento de los pacientes con enfermedad compensada que habían recibido tratamiento previo y el 68 por ciento de los que sufrían la enfermedad descompensada también lograron respuesta virológica. Asimismo, se demostró que es generalmente bien tolerado.
Asimismo, se han presentado varios subestudios clínicos y en la vida real para demostrar su seguridad, en los que se compara otras moléculas como adefovir, en pacientes HbeAG-positivo y negativo, y en pacientes crónicos con enfermedad hepática descompensada, y lamivudina/telbivudina en crónicos HbeAg-negativo. Los nuevos datos presentados de estos estudios han confirmado ensayos clínicos existentes y aportan información adicional a los médicos sobre el tratamiento de la hepatitis B crónica.
Finalmente, Wedemeyer ha presentado los datos sobre la seguridad y eficacia de entecavir en pacientes mayores de 50 años, de los que el 90 por ciento presentaba al menos una comorbilidad. Así, se ha observado en el 94 por ciento de los pacientes HbeA- positivo y en el 69 por ciento de los pacientes HbeAg negativo una carga viral de niveles indetectables.
NUEVA COMBINACIÓN
De las personas expuesta a la hepatitis C, alrededor del 40 por ciento se recupera completamente, mientras que el 60 por ciento restante se convierte en crónico, lo que puede terminar causando cirrosis e insuficiencia hepática, en consecuencia se podría llegar a producir un cáncer de hígado.
Por este motivo, es importante avanzar en nuevos tratamientos, lo que ocurre es que el virus es complejo y los diferentes genotipos dificultan el desarrollo de una vacuna única (caso de la hepatitis B), y, hasta el momento, los pacientes que ya han contraído el virus son tratados con interferón pegilado y ribavirina.
Por ello, el vicepresidente de Desarrollo, Neurociencia y Virología de BMS, el doctor Douglas J. Manion, ha explicado que los tratamientos deben de prevenir las consecuencias mortales de la infección a largo plazo y, por otra parte, tratar de eliminar el virus de la sangre seis meses después de haber finalizado el tratamiento.
"Va a haber un incremento dramático" de muertes en caso de no encontrar una terapia adecuada, se están desarrollando dos nuevos inhibidores que son los NS5A y NS53 que se pueden suministrar con el interferón pegilado; y el interferón pegilado lambda (lambda pegIFN), "una promesa a largo plazo", que se encuentra en desarrollo (fase II) en combinación con ribavirina, que por el momento ha demostrado una sólida actividad.
Finalmente, la compañía farmacéutica está desarrollando brivanib, una nueva molécula que inhibe el factor de crecimiento endotelial vascular y el factor de crecimiento en fibroblasto. Este potencial tratamiento podrá ayudar a reducir las tasas de mortalidad por cáncer de hígado, que se calculan superan las 694.000 en todo el mundo.