MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
Médicos internistas del Grupo de Trabajo de Riesgo Vascular de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) han advertido que la prevención es clave, al ser una medida de "gran impacto" para lograr alargar la esperanza de vida y garantizar también la "calidad de vida" de los ciudadanos.
En el marco de la 'XIX Reunión de Riesgo Vascular de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI)' se han reunido 130 médicos internistas para actualizar y revisar los aspectos más controvertidos o novedosos sobre los factores de riesgo vascular y la enfermedad cardiovascular, con especial foco en la prevención y en las nuevas posibilidades diagnósticas y terapéuticas en estos campos.
El coordinador del Grupo Grupo de Trabajo de Riesgo Vascular de la SEMI, ha indicado que se han tratado "temas muy actuales en el campo de la hipertensión, diabetes y la dislipemia, y de problemas vasculares importantes para la práctica clínica del internista, como la enfermedad arterial periférica, y otros más novedosos, pero no por eso menos importantes, como es la isquemia mesentérica aguda".
En este sentido, desde la SEMI han recordado que, actualmente, las enfermedades cardiovasculares constituyen la "primera causa de mortalidad y de años perdidos de esperanza de vida en España". Por ello, han mencionado dos estudios clave sobre dieta y prevención del riesgo vascular, el PREDIMED en prevención primaria y el CORDIOPREV en prevención secundaria, y en los que Medicina Interna ha tenido un papel protagonista.
Se ha puesto de manifiesto que el panorama de la "reducción de lípidos está evolucionando rápidamente y que estos ensayos publicados recientemente brindaron "nuevos conocimientos". De ahí que hayan destacado el ensayo CORDIOPREV, que se inició en 2009 y cuyos resultados fueron publicados en 2022 en 'The Lancet'. Fue un ensayo controlado aleatorizado realizado por internistas de Córdoba en el que participaron 1.002 pacientes, con edad media de 59,5 años, el 82,5 por ciento hombres, y con cardiopatía coronaria establecida.
Se demostró que la "dieta mediterránea evita 1 de cada 4 eventos cardiovasculares recurrentes en pacientes ya tratados". Se trata de eventos clínicamente muy graves, "como una muerte súbita, un infarto agudo de miocardio, un accidente cerebrovascular, la necesidad de ser sometido a cirugía o a procedimientos percutáneos de revascularización coronaria, o incluso episodios de isquemia de extremidades inferiores".
A lo largo de la reunión, también se ha hablado de otras novedades farmacológicas como el inclisirán, que es "un ARN pequeño de interferencia que inhibe la traducción de ARNm hepático para PCSK9 reduciendo los niveles circulantes del mismo", y los resultados del estudio ORION-3 que concluye que el este fármaco "administrado dos veces al año logró reducciones sostenidas en los niveles de colesterol LDL, PCSK9 y otras lipoproteínas con una buena tolerancia y un buen perfil de seguridad".
Asimismo, también se ha hablado del "riesgo residual cardiovascular, que es aquel que, después de alcanzar los niveles de lipoproteína de baja densidad (LDL) óptimos, hace que los pacientes sigan teniendo la probabilidad, en mayor o menor medida, de tener otro evento cardiovascular, y del papel del icosapento de etilo en su reducción".
La mayoría de pacientes que son vistos en Medicina Interna (hasta 9 de cada 10, según el estudio MICARE), presentan algún factor de riesgo vascular. Además, cerca de la mitad (50 por ciento) tienen ya enfermedad vascular establecida, tanto en consultas monográficas como en generales y de forma independiente respecto al tipo de hospital.